ESTOCOLMO.- El fabricante de coches sueco Saab solicitó hoy el concurso de acreedores, según acordó la gerencia de la empresa en Trollhttan.
El grupo Saab, que tiene 4.000 empleados en Suecia, pertenece a la estadounidense General Motors (GM), una empresa fuertemente golpeada por la crisis.
De momento se ha acordado continuar la producción. Una de las posibilidades que se baraja para salvar la empresa, según medios locales, es que se una con Opel, el fabricante de coche alemán, también en manos de GM. Saab vendió el año pasado 94.000 coches.
La empresa se encuentra desde hace años en números rojos. Esta semana, la ministra sueca de Economía, Maud Olofsson, ya señaló que la reordenación de este fabricante relativamente pequeño después del concurso de acreedores era probablemente la solución más probable y mejor.