PARÍS.- La automotriz francesa Renault es víctima de una red organizada internacional, pero no se ha producido una filtración de información crucial sobre su programa para la creación de un automóvil eléctrico, dijo un alto ejecutivo.
Tres ejecutivos de Renault, incluyendo un miembro de su comité de dirección, fueron suspendidos el lunes por filtrar información, en un escándalo de espionaje industrial que llevó al Gobierno francés a advertir sobre un "riesgo general" para el sector automotriz del país.
En una entrevista para la edición de fin de semana del diario Le Monde, el jefe de operaciones Patrick Pelata dijo que pudo haberse filtrado información sobre los costos y el modelo económico del programa.
"Llegamos a la conclusión de que estábamos frente a un sistema organizado de recolección de información económica, tecnológica y estratégica en favor des los intereses del extranjero", declaró Pélata sin hacer referencia a la pista sobre China, evocada por la prensa.
"Esto es trabajo de profesionales. Renault es víctima de una red organizada internacional", agregó.
"Hicimos el balance con nuestro equipo técnico (...). Las cosas son claras: ningún tesoro tecnológico ni estratégico, en lo que concierne la innovación, pudo haberse filtrado fuera de la empresa, incluyendo las 200 patentes inscritas o en proceso de inscripción", explicó.
"Sin embargo, creemos que información sobre la arquitectura de nuestros vehículos, sobre el costo y el modelo económico del programa (del auto eléctrico) pudieron haber filtrado", agregó Pélata.
"Es grave pero no tanto como si los daños hubiesen alcanzado el sector tecnológico", concluyó subrayando que este caso "no cambia en nada el programa de desarrollo del vehículo eléctrico", prioridad de Renault.