BUENOS AIRES.- Las exportaciones de vinos de Argentina a Estados Unidos lograron desbancar en 2010 a las de Chile debido al tipo de cambio y al posicionamiento de la variedad "Malbec" en el exterior.
El año pasado, Argentina exportó vinos a EE.UU. por valor de US$ 222 millones, doce millones más que las efectuadas por Chile, precisó un informe del sector vitivinícola publicado por la prensa bonaerense.
De este modo, Argentina desplazó a Chile del cuarto puesto en la clasificación de mayores exportadores de vinos al mercado estadounidense.
Las ventas de vinos argentinos al exterior alcanzaron en 2010 una cifra récord al superar los US$ 860 millones en total, lo que significa un aumento del 12% en relación a 2009, cuando Argentina tuvo una magra cosecha.
Portavoces del Instituto Nacional de Vitivinicultura confirmaron la ventaja de Argentina sobre Chile en las ventas a EE.UU., donde los exportadores argentinos se sitúan en el cuarto puesto, detrás de Italia, Francia y Australia.
"Es una buena noticia, pero nada más que eso. Lo importante es que, en una coyuntura adversa, la Argentina siguió creciendo, y eso es muy meritorio", sostuvo el gerente de Bodegas de Argentina, Juan Carlos Pina, al diario bonaerense Clarín.
Para José Zuccardi, propietario de una de las bodegas, "la crisis en EE.UU. hizo que la gente dejara de consumir vinos europeos" y buscara "otras opciones" en las que "aparece el Malbec", que en los últimos años se ha convertido en una locomotora del crecimiento de las exportaciones de vino argentino.
"También es importante tener presente la desfavorable situación cambiaria de Chile con la relación al dólar", comentó Angel Vespa, presidente de Bodegas de Argentina.
En noviembre pasado, el Gobierno argentino declaró al vino como su "bebida nacional", en un reconocimiento a una industria que alcanzó una facturación anual de 10.500 millones de pesos (2.625 millones de dólares) y en el que trabajan 400.000 personas.
El sector logró revertir su situación de 2009, cuando debió importar vino del vecino Chile a causa de la magra cosecha de ese año por factores climáticos adversos.
Argentina es el quinto elaborador mundial de vinos, el noveno exportador a nivel global y ocupa el séptimo lugar en consumo per cápita de vino a nivel mundial, con unos 30 litros anuales por persona, aunque lejos de la media de 90 litros que el país suramericano tenía hace cuarenta años.
Según datos oficiales, el 77% de la producción argentina se destina al consumo doméstico y el resto se exporta.