SEÚL.- LG Electronics, el tercer fabricante mundial de teléfonos móviles, anunció hoy que en 2010 tuvo una pérdida neta récord de 635.900 millones de wones (415 millones de euros) debido a su tardía entrada en el mercado de "smartphones" y la baja demanda de televisores.
La pérdida neta anual es la más alta desde que la empresa se reorganizó en 2002 y mucho más abultada si se compara con el beneficio de 1,15 billones de wones (751 millones de euros) que obtuvo la compañía surcoreana en 2009.
El año pasado las ventas de LG Electronics cayeron un 4,2 por ciento hasta los 29,24 billones de wones (19.107 millones de euros), lo que hizo que en términos operativos (por actividad ordinaria) perdiera un 1,1 billones de wones (718 millones de euros).
En el último trimestre de 2010, LG cayó hasta una pérdida neta de 256.500 millones de wones (167 millones de euros), lo que supone el primer resultado trimestral en números rojos desde comienzos de 2009.
No obstante, entre octubre y diciembre las ventas se recuperaron un leve 1,8 por ciento, que no sirvió para evitar una pérdida operativa de 245.700 millones de wones (160 millones de euros).
La compañía achacó los malos resultados a la caída de los precios en sus productos estrella como teléfonos móviles y televisores, algo que coincide con las previsiones del mercado que no esperaban un buen año para el gigante electrónico surcoreano.
LG no ha sido tan rápido como su competidor local Samsung Electronics a la hora de imponer su marca en el lucrativo mercado de los "smartphones", que desde la llegada de el iPhone de Apple ha demostrado ser el futuro de la telefonía móvil.
La compañía no cree que su negocio de teléfonos se recupere hasta el primer o segundo trimestre de este año, en el que tendrá que competir por mantenerse en presencia de compañías en alza como Samsung, Apple o RIM, fabricante de las Blackberry.
Además, LG considera que los beneficios en el apartado de televisores seguirán sufriendo la caída los precios y el aumento de la competencia.