WASHINGTON.- El Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció el jueves que reducirá la cantidad de dinero que tiene depositado en la Reserva Federal para financiar programas de préstamos de emergencia, debido a que se acerca a su límite legal de deuda.
A partir del 3 de febrero, el Tesoro reducirá gradualmente el balance en el Programa de Financiamiento Suplementario a 5.000 millones desde 200.000 millones de dólares.
Una funcionaria del Tesoro habló con la prensa sobre el contexto de la operación, y dijo que la medida era adoptada debido a que el Tesoro se estaba acercando al límite de emisión de deuda de 14,294 billones de dólares. Hasta el 25 de enero, el Tesoro contaba con deuda en circulación por 14,015 billones de dólares, dejando un margen de emisión de tan sólo 279.000 millones de dólares.
"Esta medida se está adoptando para preservar la flexibilidad en la conducción de la política de manejo de deuda", dijo la secretaria asistente del Tesoro para los mercados financieros, Mary Miller.
El programa de financiamiento suplementario que ha llevado al Tesoro a dejar fondos en depósito en la Fed fue establecido durante la crisis financiera. Al reducir sus depósitos en este, el Tesoro puede ganar un margen de préstamos para otros propósitos.
La medida del jueves probablemente sea la primera de una serie de políticas que el Tesoro se verá obligado a adoptar a medidas que se intensifica la disputa política sobre si se debe o no elevar el límite de emisión de deuda de Estados Unidos.
El secretario del Tesoro, Timothy Geithner, advirtió al Congreso que el límite de deuda se podría alcanzar tan pronto como el 31 de marzo, o hasta el 16 de mayo, dependiendo del desempeñó de la economía y la recaudación de impuestos.
No elevar el límite de deuda para entonces podría llevar a Estados Unidos a una moratoria, algo que nunca ha pasado en la historia del país.
Los republicanos en el Congreso, ahora al mando de la Cámara de Representantes, se resisten a un incremento automático en el límite, y lo han condicionado a lo que consideran una necesaria reducción en los gastos del Gobierno.