BRUSELAS.- La inflación en la zona euro se aceleró más de lo esperado en enero, avanzando muy por encima de la meta del Banco Central Europeo (BCE), en lo que probablemente encienda especulaciones en el mercado de que el BCE podría tener que subir las tasas de interés antes de lo planeado.
La oficina de estadísticas de la Unión Europea Eurostat estimó hoy que los precios al consumidor en los 17 países que usan el euro subieron un 2,4 por ciento a tasa anual en enero tras un avance del 2,2 por ciento en diciembre. Economistas consultados por Reuters esperaban un alza del 2,3 por ciento.
El BCE quiere que la inflación se mantenga cercana pero por debajo del 2 por ciento. La oficina de estadísticas no suministró razones ni una cifra mensual o el desglose interanual, pero los economistas atribuyen el alza de la inflación principalmente a los costos más altos de la energía y los alimentos.
El BCE ha dicho que espera que los precios suban con mayor intensidad que sus objetivos en los próximos meses, alcanzando un 2,4 por ciento en marzo para luego desacelerarse.
El miembro del consejo de Gobierno del BCE Ewald Nowotny dijo el martes pasado que no esperaba una decisión para subir las tasas de interés en el primer semestre del año.
Muchos economistas esperan que el BCE sólo suba las tasas de interés desde el mínimo récord del 1 por ciento a fines del 2011 y algunos incluso ven una subida apenas a principios del 2012.
El indicador adelantado de inflación combina datos históricos y la información disponible más reciente y en los dos últimos años ha coincidido en 21 ocasiones con el dato definitivo, mientras que en las tres ocasiones restantes la desviación sólo fue de una décima.
Por otro lado, el Instituto Nacional de Estadística ha informado de que el Índice de Precios de Consumo (IPC) de España se situó en enero en el 3,3%, tres décimas más que en el mes anterior, lo que eleva el diferencial respecto a la eurozona a nueve décimas.