Según los datos de la Comisión Europea, más de la mitad de los adolescentes de 13 a 16 años acceden a Internet desde sus dormitorios.
El MercurioBRUSELAS.- La Comisión Europea ha pedido hoy al sector de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) productos "más seguros", que no pongan en riesgo al menor que navega en Internet, y se ha comprometido a "intensificar sus conversaciones" con esta industria y con las organizaciones de la infancia para lograrlo.
El acceso a Internet se produce cada vez a una edad más temprana, no sólo desde el ordenador, sino también desde consolas y teléfonos móviles. Más del 82% de los adolescentes de 15 y 16 años y el 26% de los niños de entre 9 y 10 años tienen algún perfil en las redes sociales, según indica el Ejecutivo comunitario.
Por eso Bruselas prevé revisar sus políticas relacionadas con esta cuestión, incluida la recomendación de 2006 sobre los mejores y cómo protegerlos en los medios audiovisuales e Internet y una comunicación de 2008 para la protección de los más jóvenes ante contenidos perjudiciales en los videojuegos.
Además, la Comisión advierte que la evolución de la red y del acceso cada vez más "individual" a sus contenidos, hace necesario ampliar la colaboración que existe a "nuevos grupos e industrias" para mantener un alto nivel de protección del menor.
Los teléfonos inteligentes, las consolas de videojuegos y otras formas de acceso a Internet "suponen una mayor responsabilidad del sector de las TIC a la hora de ofrecer productos y servicios que protejan y capaciten a los niños en línea", en opinión de la vicepresidenta del Ejecutivo comunitario y responsable de Agenda Digital, Neelie Kroes.
"Hemos colaborado fructíferamente con las redes sociales y las empresas de telefonía móvil. Ahora hacemos un llamamiento al sector de las TIC en su conjunto para que cooperen al efecto de proteger a los niños en línea", indicó Kroes en un comunicado.
Con ello, Bruselas quiere involucrar a los fabricantes de dispositivos de telefonía móvil y de consolas de juegos, a los proveedores de servicios de Internet, a las empresas de redes sociales, a los proveedores de aplicaciones móviles y de contenidos, a las organizaciones de consumidores y a los investigadores y a las organizaciones de la infancia.
Según datos de Bruselas, uno de cada tres niños que navegan por Internet lo hacen mediante sus teléfonos móviles y uno de cada cuatro, mediante sus consolas de juegos.
Por otro lado, más de la mitad de los adolescentes de 13 a 16 años acceden a Internet desde sus dormitorios.