Quieres ver tu clima local?
Mostrar
Santiago: Jueves 30 de enero del 2025 | Actualizado 19:02
SANTIAGO.- La producción de cereales creció un 16,6% en América Latina durante 2010, empujada por las cosechas récord en Brasil, dijo hoy la FAO.
"Se superaron las 149 millones de toneladas", indicó la Organización para la Alimentación y la Agricultura de Naciones Unidas en un informe sobre perspectivas de las cosechas.
No obstante, la entidad alertó que las proyecciones para 2011 son dispares y varían según países y productos, con problemas en la producción de maíz en Argentina, Uruguay y Bolivia por las sequías.
La falta de precipitaciones, que en Guatemala provocó los últimos años hambruna y muertes, también impactará en las cosechas de frijol en Nicaragua, El Salvador, Honduras y el norte de México, vaticinó la FAO.
Sin embargo, la entidad agregó que hacia fines de 2011 la producción agregada de cereales subirá un 11 por ciento en Centroamérica, alcanzando unas 43 millones de toneladas.
La mayor crisis alimentaria en la región, donde subsisten 52 millones de personas en hambre, estará en Haití, donde unos tres millones necesitarán ayuda en el suministro de nutrientes, acotó la FAO.
En contraste, Brasil continuaría con perspectivas positivas para el arroz y el maíz, pese al impulso de los biocombustibles en ese mercado.
La clave está en el alza de los precios internacionales de los alimentos, en un escenario de volatilidad. "El maíz amarillo y la harina de trigo en América del Sur están sufriendo alzas generalizadas", ejemplificó la FAO.
En ese marco, el oficial a cargo de la Oficina Regional de la FAO para América Latina y el Caribe, Alan Bojanic, valoró el aumento de la producción en la región.
"Se trata de una señal positiva, especialmente dado el contexto internacional de alta volatilidad de los precios, que impacta principalmente a la población más pobre", subrayó.
El funcionario además insistió en la necesidad de "apoyar la productividad y producción de alimentos (...) para atenuar la transmisión de los precios internacionales de los alimentos a los precios domésticos".
