MUNICH.- Un antiguo ejecutivo del gigante tecnológico alemán Siemens admitió hoy que la empresa pagó sobornos para ser favorecida en licitaciones en el extranjero.
Rainer Niedl, quien ocupó el cargo de responsable de la política de anticorrupción de la división de telecomunicaciones de Siemens, ICN, argumentó ante un tribunal en Múnich que de otra manera no hubiera sido posible hacer negocios en muchos países del mundo.
Niedl, hoy jubilado, prestó declaración en el juicio que se celebra contra el ex directivo de Siemens Thomas Ganswindt por la trama de sobornos que hundió hace cuatro años a la empresa en su peor crisis.
El testigo dijo que no informó de ello a Ganswindt y aseguró que éste estaba dedicado de lleno a la reestructuración de su área de negocios y la supresión de puestos de trabajo.
Ganswindt enfrenta cargos de evasión fiscal y violación del deber de control ante la cámara primera comercial del Tribunal Provincial de Múnich.
El hasta ahora el directivo más alto juzgado por el escándalo fue responsable de 2004 a 2006 de la división de telecomunicaciones, donde comenzó la trama. El ex directivo negó los cargos, alegando que siempre había confiado en el equipo encargado de las finanzas de su división.
Se sospecha que Siemens pagó alrededor de 1.300 millones de euros en sobornos (unos 1.700 millones de dólares) desde mediados de los 90 hasta 2007 para ganar contratos en el extranjero.
Los pagos incluyeron multimillonarias comisiones al gobierno argentino durante la presidencia de Carlos Menem (1989-1999) para un contrato de digitalización de documentos de identidad.
Antes que Ganswindt fueron condenados varios de sus ex colaboradores a multas y penas de prisión en suspenso.