NUEVA YORK.- El principal índice de la Bolsa de Nueva York terminó sobre los 12.500 puntos este jueves, por primera vez en cerca de tres años, gracias a una nueva serie de resultados de empresas que superaron las previsiones: el Dow Jones ganó 0,42% y el Nasdaq 0,63%.
Según cifras definitivas de cierre, el Dow Jones Industrial Average subió 52,45 puntos a 12.505,99 puntos y el Nasdaq, de alto componente tecnológico, aumentó 17,65 puntos a 2.820,16 puntos.
El índice ampliado Standard & Poor’s 500 se incrementó 0,53% (7,02 puntos) a 1.337,38 puntos.
El Dow Jones terminó una semana corta -ya que el viernes no abren los mercados estadounidenses- en su nivel más alto desde el 5 de junio de 2008.
"Es una semana alentadora", consideró Peter Cardillo, de Avalon Partners. "Lo único que cuenta son los resultados".
Las operaciones estuvieron animadas por la publicación de una serie de resultados trimestrales de empresas estadounidenses, que en su mayoría superaron las previsiones de los analistas.
El sector tecnológico lideró nuevamente gracias al crecimiento del grupo informático Apple (+2,42% a 350,70 dólares) y del fabricante de componentes Qualcomm (+3,02% a 56,94 dólares), que destacaron la fuerte demanda de los teléfonos multifunciones.
"Es una semana acortada, la participación es baja", constató un operador de un gran banco europeo.
"El mercado responde positivamente a la publicación de resultados", agregó la fuente, pero "los indicadores no son excepcionales".
Las solicitudes de beneficios por desempleo bajaron la semana pasada en Estados Unidos pero menos que lo previsto.
Otra decepción, el alza de la actividad industrial en la región de Filadelfia (noreste) se desaceleró netamente en abril.
Por el contrario el indicador compuesto avanzado de la actividad económica aumentó 0,4% en marzo, el doble que lo previsto.
En el mercado obligatorio, el rendimiento del bono del Tesoro a 10 años se situó en 3,400% al igual que en la noche del miércoles y los de los títulos a 30 años en 4,476% contra 4,454%. El rendimiento de las obligaciones evoluciona en sentido opuesto a sus precios.