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Santiago: Jueves 21 de noviembre del 2024 | Actualizado 12:28
WASHINGTON.- La automotriz Chrysler devolvió los US$ 7.600 millones que le debía a los gobiernos de Estados Unidos y Canadá por el rescate que le ofrecieron en 2009, en medio de la crisis, según informó hoy la compañía.
En un comunicado emitido desde Reino Unido, donde se encuentra de visita, el presidente estadounidense, Barack Obama, elogió el pago y lo calificó de un "hito significativo para el regreso de Chrysler y para las innumerables comunidades y familias que dependen de la industria automotriz estadounidense".
La cifra total, que fue devuelta seis años antes de lo previsto, incluye 5.900 millones de dólares para el Tesoro estadounidense y 1.700 millones de dólares para el gobierno de Canadá y de Ontario. Además comprende 1.800 millones de dólares en intereses y otros honorarios, según Chrysler.
El gobierno estadounidense aún es dueño del 6,6% de Chrysler, que declaró la bancarrota en 2009 bajo presión gubernamental en medio de la crisis económica, de la que salió poseído mayoritariamente por la italiana de Fiat.
Sergio Marchione, el jefe de Fiat que asumió las operaciones de Chrysler, dijo que los préstamos le dieron a la empresa "una singular segunda oportunidad para demostrar lo que la gente de esta compañía puede ofrecer".
"Tenemos una deuda de gratitud con aquellos cuya intervención le permitió al grupo Chrysler restablecerse como un fabricante de automóviles fuerte y viable", señaló.
El gobierno en Washington podría recuperar aún más dinero si vende su participación a través de una oferta de acciones o de la venta de su parte a otro inversor. Marchionne dijo que este año o el próximo podría darse una oferte pública de acciones, según el "Detroit Free Press".
Fiat, con sede en Turín, Italia, indicó que pagará otros 1.270 millones de dólares para adquirir otro 16 por ciento de Chrysler. La compañía italiana quiere quedarse con el 51 por ciento de la automotriz y que Chrysler vuelva a comercializarse públicamente.
El grupo Chrysler reportó este mes sus primeros resultados positivos en dos años, con un beneficio neto de 116 millones de dólares para el primer trimestre. Un aumento en las ventas de sus vehículos Dodge y Jeep ayudó a impulsar sus ganancias.
Obama dijo que la medida de rescatar a Chrysler, que generó una fuerte condena de los opositores republicanos durante sus primeros meses de gobierno, requirió de "algunas decisiones difíciles". "Pero yo no estaba dispuesto a abandonar a los trabajadores de Chrysler y a las comunidades que dependen de esta icónica compañía estadounidense".
"Aunque hay más trabajo por hacer, estamos empezando a ver ventas importantes, turnos adicionales en las plantas y señalaes de fortalecimiento en la industria automotriz y en nuestra economía, un verdadero testamento de la resolución y determinación de los trabajadores estadounidenses a lo largo del país", agregó el mandatario.
