LISBOA.- La agencia de calificación de riesgo Moody's puso hoy a los principales bancos portugueses bajo vigilancia para una posible rebaja de la nota de solvencia crediticia a causa del difícil entorno del país.
Las entidades bajo aviso son la estatal Caixa Geral de Depositos (CGD), el Banco Comercial Portugués (BCP), el Banco Portugués de Inversión (BPI), el Banco Espirito Santo (BES), el Banco Internacional de Funchal (Banif), el Santander Totta, filial de la entidad española Santander, y el Montepio Geral.
Moody's explica que la alerta se debe también a la calificación de la deuda soberana lusa, que fue recortada en un escalón el pasado 5 de abril hasta "Baa1" desde "A3".
La media de la agencia de evaluación, similar a la adoptada por otras entidades de calificación, antecedió a la petición de ayuda financiera externa que hizo Portugal el pasado 6 de abril.
La agencia de medición pronostica que el actual escenario económico puede "presionar" negativamente los beneficios y la calidad de los activos de los bancos, a los que se limitará "todavía más" el acceso a fondos y a capital.
Respecto al préstamo de 78.000 millones de euros pactado con la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), la agencia considera probable que el sector bancario recurra a los 12.000 millones de euros reservados en ese programa para su capitalización.
Moody's vuelve a mencionar los riesgos de la "inestabilidad" en Portugal, aunque tras las elecciones lusas del pasado domingo el centro-derecha prepara un Gobierno de mayoría absoluta con los democristianos para sustituir al minoritario Ejecutivo socialista.