WASHINGTON.- El Departamento del Tesoro de Estados Unidos mantuvo el viernes la presión sobre el Congreso para que se alcance un acuerdo que eleve el límite de la deuda federal y así se evite una cesación de pagos, reiterando que el 2 de agosto se quedará sin espacio legal para endeudarse.
El presidente Barack Obama ha debido enfrentarse a los congresistas republicanos, que están utilizando el techo legal del endeudamiento de 14,3 billones de dólares como herramienta de presión para aplicar mayores recortes en el gasto.
Los demócratas afirman que existe un falso debate, ya que los republicanos defendieron recientemente recortes a los impuestos de los más ricos, que contribuyeron de forma significativa al déficit.
El secretario del Tesoro, Timothy Geithner, ha advertido de mayores riesgos para la economía mundial si el Congreso no actúa, ya que podría provoca una cesación de pagos de la deuda estadounidense, que remecería a un sistema bancario aún frágil.
"Geithner llamó al Congreso a evitar las catastróficas consecuencias para la economía y el mercado de una crisis provocada por una moratoria, elevando el límite legal del endeudamiento de forma oportuna", estimó Mary Miller, secretaria asistente para los mercados financieros, en un comunicado.
El miedo a una moratoria técnica ha aumentado luego de que las conversaciones bipartidistas entre la Casa Blanca y los legisladores colapsaran en Washington la semana pasada.
El estancamiento de las negociaciones ha llevado a que las agencias de calificación adviertan de una posible rebaja de la máxima nota crediticia "AAA" que ostenta Estados Unidos.
El mercado de bonos de la deuda del Gobierno es considerado el más seguro y líquido, y los inversionistas en todo el mundo guardan grandes cantidades de papeles como un activo de refugio.
Si los bonos del Tesoro fueran considerados más riesgosos de forma repentina, las tasas de interés en Estados Unidos podrían dispararse y los mercados bursátiles y el valor del dólar caerían de forma brusca.