LONDRES.- La factura que pagan los británicos por mantener a la reina Isabel II disminuyó en 1,8 millones de libras (US$ 2,8 millones) durante el año pasado, según las cuentas divulgadas este lunes por el Palacio de Buckingham.
Los gastos oficiales de la reina bajaron un 5,3% hasta los 32,1 millones de libras (US$ 51,6 millones) en el ejercicio fiscal 2010/11, contra 33,9 millones en el periodo anterior.
El descenso se debe principalmente a un "aumento de generación de ingresos, al aplazamiento de gastos de mantenimiento de las propiedades y a la aplicación de un congelación de salarios", explicó Sir Alan Reid, tesorero del Palacio de Buckingham, a través de un comunicado.
Los gastos de viaje, sin embargo, se incrementaron hasta los US$ 9,6 millones, contra los US$ 6,2 millones del año pasado.
El tesorero real aseguró que "la Reina desea que la casa real continúe reduciendo sus gastos conforme a los recortes del gasto público".
Sin embargo, advirtió que después de haber reducido la factura en un 19% en términos reales en los últimos cinco años, será "muy difícil" seguir bajándolos "mucho más" sin que se noten los efectos.
Dentro del programa de austeridad decretado por el gobierno británico desde 2010, los diputados votaron la semana pasada a favor de una reducción de los fondos públicos concedidos a la familia real hasta 2015.
Si ésta se aprueba definitivamente, la reina recibirá 35 millones de libras (unos US$ 56 millones) en 2014/15 para cubrir todos su viajes y compromisos.
Los ahorros de la reina se publican una semana después de la divulgación de las cuentas oficiales de su primogénito y heredero de la Corona, el príncipe Carlos, que el año pasado costó casi un 18% más al contribuyente, aunque también pagó más impuestos al fisco.