SANTIAGO.- El presidente de la Cámara de Comercio de Santiago (CCS) Peter T. Hill, condenó este miércoles las conductas y prácticas realizadas por algunos ejecutivos de La Polar, enfatizando que “en nuestro gremio no se escuchará una voz que defienda conductas reñidas con la ley, la ética y la fe pública".
En el marco del seminario “Diferenciación: La Nueva Clave Competitiva del Retail", organizado por la Cámara de Comercio de Santiago (CCS) y el Centro del Retail de la Universidad Adolfo Ibáñez, el dirigente pidió ubicar el problema en su exacto contexto y dimensión.
"No creemos que sea justo que una situación específica, por grave que sea, justifique poner en duda un modelo cuyos frutos generalizados dan testimonio de sus méritos y virtudes", aseveró el represente gremial.
En ese sentido, el líder de la CCS solicitó cautela en las reacciones relativas a reformular la legislación que actualmente rige para la actividad crediticia. “Antes de idear nuevas normas, hay que revisar si acaso las disposiciones legales y reglamentarias vigentes fueron debidamente aplicadas en esta contingencia de La Polar".
Hill criticó, abiertamente a quienes “pretenden sacar ventaja de lo ocurrido llamando a consolidar la información de deudas, cumpliendo así un antiguo anhelo de la Banca, competencia del retail financiero, para obtener acceso a la cartera de los clientes del comercio”.
También cuestionó la “demonización” a un sector “que en las últimas décadas ha contribuido - en forma decisiva - al desarrollo social y económico del país. Un sector que, tanto en épocas de bonanza como de recesión económica, no ha escatimado en otorgar créditos para que cientos de miles de familias chilenas tengan acceso a bienes y servicios que han permitido mejorar sus calidades de vida".
En este marco, el líder gremial destacó que el comercio da trabajo a más de un millón y medio de personas en Chile y específicamente, a 700 mil mujeres, lo que significa que 1 de cada 4 empleos femeninos son creados en forma exclusiva por el sector comercio".
"En el caso de los jóvenes, la flexibilidad de los horarios del comercio lo hacen una gran alternativa laboral, ya que les permite trabajar y estudiar al mismo tiempo, inclusive en domingos y festivos. De allí que nos opongamos a que se prohíba el funcionamiento de los comercios en esos días", añadió Hill.