SANTIAGO.- La danesa A.P. Moller - Maersk Group, anunció hoy la firma de un contrato con la compañía chilena Astilleros y Servicios Navales S.A. (Asenav), el mayor astillero privado del país, para que le construya dos nuevos e innovadores buques de alta mar.
Según informó la propia firma danesa a través de un comunicado, el monto del negocio por los dos buques es cercano a los US$ 200 millones. Sin embargo, el proyecto podría ser aún mayor, puesto que el contrato incluye la opción de poder encargar la construcción de hasta cuatro unidades adicionales.
Este tipo de trato no es nuevo entre Asenav y Maersk, puesto que la valdiviana ya había construído otras cinco embarcaciones para la danesa: Maersk Dispatcher, Maersk Detector, Svitzer Bedford, Maersk Nomad y Maersk Nexus.
Las naves, que serán construidas en la fábrica que el astillero mantiene en Valdivia (Región de Los Ríos), reemplazarán a los actuales buques de Maersk que operan en el mercado de alta mar en Canadá.
"Estamos muy contentos de anunciar este pedido de dos nuevos buques, que representarán mejoras adicionales a los altos estándares de servicio que prestamos, al entorno de trabajo en que se desempañan las tripulaciones a bordo y al medioambiente, dado el perfil ecológico que tendrán estas nuevas naves", sostuvo a través de un comunicado Carsten Plougmann Andersen, director ejecutivo de Maersk Supply Service, la división de negocios de A.P. Moller - Maersk Group
Estos grades barcos estarán diseñados para desarrollar una amplia gama de servicios en la industria de alta mar, incluyendo maniobras con icebergs, manejo de anclas, servicio de guardia, asistencia general en torres de perforación y otras instalaciones internacionales que abastecen suministros básicos, como combustible, agua, equipos, lodo de perforación y otros materiales necesarios para las operaciones de perforación, según informa la danesa.
Alta tecnología y eficiencia
Plougmann destacó de manera especial que "estos buques establecerán un nuevo estándar para los niveles de emisiones, eficiencia operativa y tiempo de funcionamiento en la industria de alta mar, gracias a un número de nuevas características de diseño". El nuevo estándar que ha encargado Maersk implica un ahorro energético de hasta un 25%, gracias a sus nuevas tecnologías.
Las dos naves han sido diseñadas para que se adapten al perfil operativo de los buques que trabajan mar adentro al este de Canadá. Esto significa que el casco ha sido diseñado para que se adapte a los modelos de velocidad y de trabajo en un entorno sumamente riguroso.
Según informa la multinacional, a diferencia de los buques de suministro convencionales, la maquinaria de estos nuevos buques ha sido optimizada para un menor consumo de energía. La hélice principal y las laterales sólo giran cuando es necesario. Asimismo, la ventilación de la sala de motores, el agua de enfriamiento del mismo y otros sistemas, se aplican de una forma más inteligente para ajustarse a las necesidades de la tripulación y de los equipos.
Las naves fueron diseñadas en colaboración con Maersk Maritime Technology y Wartsila Ship Design, y tendrán una tracción sobre bolardo de 150 toneladas.
La entrega de las dos embarcaciones está programada para febrero de 2014 y enero de 2015.
El contrato con Asenav fortalece más aún la relación entre A.P. Moller ‐ Maersk Group y Chile. Según destaca la danesa, en noviembre de 2011, Maersk Container Industry informó que construirá en Chile la primera fábrica de contenedores de refrigerados de Latinoamérica, lo que implicará una inversión de US$ 170 millones y 1.800 puestos de trabajo directos para el país.