SANTIAGO.- El Superintendente de Bancos e Instituciones financieras (SBIF), Carlos Budnevich renunció a su cargo durante la jornada de ayer y se oficializó esta mañana.
Fuentes del sector consultados por Emol han confirmado la información y se espera que el ministerio de Hacienda y la Superintendencia de Bancos emitan un comunicado para dar a conocer el nombre del reemplazante de Budnevich, que asumiría luego del 31 de diciembre.
El superintendente comenzó su labor el 11 de marzo del 2010, luego de ser nombrado por el Presidente Sebastián Piñera tras desempeñarse como Coordinador de la Comisión de Mercado de Capitales de los Grupos Tantauco.
Sin embargo, los problemas del también Ph.D. en economía de la U. de Pennsylvania, comenzaron el 22 de septiembre de ese año, cuando tras el anuncio del término de las "ventas atadas" en el sector bancario, la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras (ABIF) criticó la medida y propusieron a Budnevich una serie de cambios a la iniciativa.
Posteriormente, el 15 de noviembre del 2010, el Superintendente Budnevich realizó una "precisión" a la circular y permitió a los bancos realizar ventas atadas con algunas condiciones, denominándolas como "ventas conjuntas", tras lo cual arrecieron las críticas en su contra desde todos los sectores.
Caso La Polar
En tanto, los primeros días de junio de este año, salió a la luz pública el escándalo financiero de La Polar, tras lo cual, Budnevich nuevamente fue cuestionado por la actuación de la entidad que dirigía conforme, según el Banco Central, la SBIF tenía las facultades para fiscalizar a las empresas del retail.
De hecho, el 14 de junio un grupo de parlamentarios encabezados por el diputado Chahín pidieron formalmente la renuncia de Budnevich.
Incluso, durante la formalización de los ex ejecutivos de La Polar que se realizó durante este miércoles y jueves en el Centro de Justicia, el abogado del ex gerente del retailer, Pablo Alcalde aseguró que la SBIF sabía de casos de "repactación unilateral" y que revisó los informes financieros de la auditora Price Waterhouse Coopers, sin encontar "nada extraño".