MADRID.- El gobernador del Banco de España, Miguel Angel Fernández Ordóñez, aseguró hoy que existe una "campaña de desprestigio" contra la entidad emisora, en clara alusión a las críticas que ha recibido de parte del gobernante Partido Popular (PP) por la gestión de la crisis financiera en el país.
De modo especial, el PP responsabiliza a Fernández Ordóñez de la crisis que atraviesa Bankia, el cuarto banco más grande de España, que necesita ser rescatado por el Estado por la fuerte acumulación en sus balances de activos tóxicos derivados del estallido de la burbuja inmobiliaria en la que el país vivió durante muchos años.
Fernández Ordóñez, quien anunció el martes que adelantaría un mes, al 10 de junio, su salida como presidente del Banco Central de España al agotar su mandato, rechazó en el Senado que no hubiese "entendido" o "sabido supervisar" la situación de la banca española.
Ante esa "campaña de desprestigio", el gobernador de la entidad defendió su derecho a dar su visión de la situación financiera española y que la opinión pública conozca su posición, pero aclaró que "por responsabilidad" se ve obligado a acatar la decisión de la mayoría parlamentaria del PP de impedir que comparezca en el Congreso de los Diputados.
Fernández Ordóñez insistió en la importancia de que el gobierno garantice la independencia de un órgano regulador como el Banco de España.
Cuando Fernández Ordóñez fue nombrado presidente de la entidad, en 2006, el PP cuestionó su independencia por haber ejercido un cargo en el gobierno del socialista José Luis Rodríguez Zapatero.