VALPARAÍSO.- Un tiempo para negociar antes de votar el proyecto de reajuste del salario mínimo en la Comisión de Hacienda, permitió la postergación de la sesión de esta instancia convocada inicialmente para las 11:00 horas de este miércoles, y que ahora se realizará a las 15:00 horas.
El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, se reúne en estos momentos con parlamentarios de la Coalición, luego que RN anunciara que votará a favor de la idea de legislar, pero que, en particular, solicitará elevar la propuesta del Gobierno desde $191.000 a $200.000.
El presidente de la Comisión de Hacienda, Ernesto Silva (UDI), dijo que "tomar hoy día una decisión de aumentar a CLP 200.000 no está dentro de lo posible".
A su juicio, "mirando la inflación, la productividad y el entorno internacional, la propuesta del Ejecutivo de un reajuste de 5% va en la línea correcta".
El presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Arturo Martínez, se reunió con las bancadas de la oposición, reiterando la aspiración de lograr un mínimo de $250.000, sentenciando que "el monto planteado por el Gobierno es un monto mezquino que no tiene nada que ver con la necesidad que afecta a los trabajadores".
Por eso, Martínez llamó al Parlamento a hacer "un debate a fondo sobre el tema de los salarios en el país, porque no se justifica que mientras el Gobierno señala que la economía chilena está muy bien, que ha tenido grandes logros, y mientras la ministra del Trabajo señala que estamos casi en pleno empleo, que los salarios en el país no tengan posibilidad de crecer".
Apuntó que "el 70% de los pobres trabaja con un contrato de trabajo; sin embargo, ese trabajo no le permite salir de la pobreza... el 72% está endeudado cuatro veces lo que gana; por tanto, los salarios no le permiten vivir con tranquilidad".
Los parlamentarios de oposición reiteraron su disposición a rechazar el proyecto, tal como lo plantearon ayer en la primera jornada de análisis del cuerpo legal en la Comisión de hacienda, cuando además criticaron que no estuviera el titular Felipe Larraín, sino que el subsecretario Julio Dittborn.
"(El Gobierno) nos convenció con entusiasmo de aprobar un bono solidario de alimentos, porque los sectores más vulnerables eran afectados con una inflación distinta a la general: la inflación de los alimentos básicos, que es superior al 10%. El reajuste que está proponiendo es de 5%, es decir, van a perder su capacidad de consumo que ya es muy baja. Es imposible plantear sin rechazo ético que las personas que ganan un salario mínimo vivan peor en los años 2012 y 2013”, recalcó el diputado Pepe Auth (PPD).