El Nokia Lumia 900, con sistema operativo de Windows.
BloombergESTOCOLMO.- Cuando Angelo Amato, un ex cliente de Nokia, quiso comprar un nuevo teléfono inteligente en un local de AT&T de Manhattan la semana pasada, nunca tuvo oportunidad de ver siquiera los modelos de la compañía finlandesa. El local no tenía expuesto ninguno de los Lumia lanzados nueve meses antes y el vendedor no los mencionó como opción.
"Volvería a considerar un Nokia, pero nunca he oído hablar del Lumia", dijo Amato, que tiene 41 años, dirige el Dominick’s Café en Nueva York y tiene un teléfono Android de HTC Corp.
La experiencia de Amato destaca lo que la responsable de teléfonos inteligentes de Nokia, Jo Harlow, dice que es el principal desafío de la ex firma líder del mercado, en momentos en que trata de reanimar la actividad y revertir la pérdida de participación en el mercado a manos del iPhone de Apple Inc. y de aparatos con el sistema operativo Android de Google Inc.
El trimestre pasado, Nokia vendió 600.000 teléfonos en América del Norte, con lo que casi no experimentó cambios respecto del período anterior a pesar de haber lanzado el Lumia 900 en abril en AT&T. Apple vendió 5,9 millones de iPhones en los Estados Unidos en el trimestre, según Strategy Analytics.
Stephen Elop, el ex ejecutivo de Microsoft Corp. al que se incorporó hace dos años para reanimar Nokia, con sede en Espoo, Finlandia, apuesta ahora a que una ola de gasto en publicidad de Microsoft para impulsar el nuevo software Windows 8 contribuya a mejorar las cosas para el Lumia.
Nokia y Windows Phone 8
Nokia planea anunciar teléfonos basados en Windows Phone 8 el mes próximo en su evento Nokia World –antes del esperado lanzamiento del 12 de septiembre de la próxima versión del iPhone- y ponerlos a la venta antes de la temporada de compras previas a las festividades de fin de año, dijo una persona familiarizada con el plan que pidió que no se revelara su identidad porque éste aún no es público.
Funcionarios de Nokia se negaron a hacer declaraciones sobre los tiempos relacionados con los aparatos Windows Phone.
"Para hacer un regreso, tienen que aprovechar un éxito de Microsoft en el área móvil o volver a ponerse de moda, dos desafíos complicados", dijo Arnaud Bauduin, un administrador de fondos en París de Ofi Asset Management, que gestiona US$ 61.000 millones en activos. Bauduin dijo que vendió el último de sus valores de Nokia en abril.
Para impulsar las ventas del Lumia, Nokia ha convocado a centenares de empleados voluntarios de los Estados Unidos –de departamentos tan diversos como finanzas y recursos humanos- para que trabajen junto a los vendedores. Ese grupo, apodado el Ejército Nokia, ha permitido a la compañía educar a los consumidores y al personal de venta minorista a los efectos de que mencionen el Lumia como una opción, dijo Harlow.
"Los retos se basan en la rapidez con que podamos generar esa conciencia", dijo Harlow en una entrevista de la semana pasada en Nueva York.