BERLÍN.- La Canciller alemana, Ángela Merkel declaró este viernes, tras una reunión con el Primer Ministro griego, Antonis Samarás, en Berlín, que quiere que Grecia siga en la Eurozona.
Merkel aseguró además que está convencida de que el nuevo gobierno griego hace "lo posible para resolver todos los problemas", en una conferencia de prensa conjunta en la capital alemana.
"Desde el principio de la crisis siempre dije claramente que Grecia formaba parte de la zona euro y que quería que se quedara en ella", agregó la Canciller.
Por su parte, Antonis Samaras, aseguró que el informe de la troika de acreedores (Unión Europea, Fondo Monetario Internacional, Banco Central Europeo), esperado en septiembre, "demostrará que el gobierno (griego) obtendrá resultados rápidamente".
"No pedimos más dinero, sino más tiempo para respirar", añadió el dirigente que se comprometió a aplicar las reformas que le exigen sus acreedores internacionales.
Por su parte Merkel se felicitó de este "nuevo comienzo" en la relación entre los dos países y recordó que Berlín espera que Atenas cumpla sus compromisos.
La Canciller aseguró sin embargo que quería esperar el informe de la troika, una posición que comparte con el presidente francés François Hollande, con el que se reunió el jueves por la noche.
Los dirigentes de Alemania y Grecia han multiplicado esfuerzos en los últimos días para demostrar su unidad y su comprensión mutua, a pesar de que varios responsables alemanes hablaron recientemente de la posibilidad de una salida de Grecia de la zona euro.
"La cacofonía crea problemas y las declaraciones tóxicas sólo pueden ser negativas", dijo Antonis Samaras, que pidió a Alemania que cesen esos ataques, sobre todo después de que el país haya lanzado un programa de privatizaciones.
"Somos un pueblo orgulloso. No nos gusta depender del dinero prestado", insistió el Primer Ministro.
Angela Merkel también quiso rebajar la tensión. "Creo que es mi deber hacer lo necesario para que los esfuerzos sean reconocidos", declaró.
"Tenemos que trabajar para que la mayoría de griegos y la mayoría de alemanes vean lo mismo", añadió.
Por último, la Canciller aseguró que iba a hacer todo lo necesario para que Alemania sea "lo más útil posible" para ayudar a Grecia a cumplir sus obligaciones.