El ministro de hacienda de Brasil, Guido Mantega.
ReutersBRASILIA.- El Gobierno de Brasil entregó hoy al Congreso el proyecto de presupuesto nacional para 2013, que cifró en 2,140 billones de reales (US$ 1,07 billones), en el que prevé que la economía crezca un 4,5% para el próximo año.
La ministra de Planificación, Miriam Belchior, explicó que en el proyecto se han trazado cuatro grandes ejes prioritarios, que son la inversión en las áreas de infraestructuras, salud y educación, y una ampliación de los programas sociales dirigidos a la erradicación de la miseria.
El proyecto también plantea un aumento del salario mínimo del 7,9%, con lo que la remuneración quedaría en 670,95 reales (unos US$ 335) a partir de enero próximo. El reajuste fue calculado en función de la expansión del Producto Interno Bruto (PIB) registrada en 2011 (2,7%) y la tasa de inflación del 5% que se prevé para ese año.
El equipo económico del Gobierno explicó que, además, se ha recortado al 4,5% la previsión de crecimiento para 2013, que hasta ahora era del 5,5%.
El ministro de Hacienda, Guido Mantega, quien también participó en la presentación del documento, consideró que, pese al recorte, se trata de una proyección "osada", sobre todo en el actual escenario económico global. "Nuestras previsiones van en sentido contrario de la economía mundial, que está y seguirá en crisis", declaró el ministro.
El proyecto de presupuesto calculado para 2013, que supera en cerca del 7% al aprobado para este año, prevé que la paridad cambiaria se mantendrá en torno a los 2 reales por dólar y que las tasas de interés seguirán en los niveles actuales, del 7,5% anual.