Las tendencias que se están llevando en materia de oficinas en el Gran Santiago

SANTIAGO.- Santiago sigue considerándose como una atractiva ciudad para las empresas y sus oficinas. En Emol quisimos indagar cuáles son últimas tendencias y qué nuevos barrios están surgiendo para la instalación de éstas.

Para esto, conversamos con Carolina Pérez, gerente general de Contract, una empresa de nivel regional especialista en la habilitación de espacios de trabajo.

—¿Cuáles son los sectores en donde más se están construyendo oficinas hoy en Santiago?

"Hoy en Santiago se están construyendo una gran cantidad de proyectos de oficinas. La mayoría concentrados en las comunas de Las Condes, donde se sigue densificando el área de Nueva Las Condes, el eje Apoquindo hasta Los Dominicos y algunos proyectos en el área El Golf. Providencia, eje Andrés Bello es también otro polo importante, en el que destacan los edificios de oficinas asociado al desarrollo Costanera Center. En La Dehesa también están apareciendo edificios de oficinas, orientado más bien a un mercado de oficinas profesionales. En tanto, en Santiago Centro, están apareciendo también algunos desarrollos orientados más bien a áreas de Gobierno".

—¿Cuántos son los metros cuadrados proyectados al finalizar 2012?

"Se espera que en el año 2013 se liberen sobre 300,000 m2 de oficinas nuevas, lo cual casi duplica a la cifra proyectada para el año en curso".

—Respecto de la distribución de los espacios de trabajo, ¿Cuáles son las tendencias que están prefiriendo los chilenos?

"Hasta hace 20 años las oficinas eran concebidas como máquinas donde cada cosa tenía su lugar y una funcionalidad estática. Una persona tenía una función y era sólo esa, y la privacidad era entendida como forma de eficiencia. Esto ha evolucionado en la medida que han ido cambiando las formas de trabajar. Hoy en día hay que entender que las oficinas son mucho más flexibles, están mucho más sujetas a cambios dentro de la organización, los procesos van cambiando dependiendo de los proyectos, las personas interactúan y van aprendiendo entre ellas. La interacción es concebida como parte esencial del trabajo".

"Cuando hablamos de flexibilidad cobra mucha relevancia el tema de los espacios más abiertos donde la gente se pueda ver, y el intercambio pasa a ser mucho más importante que la privacidad que se buscaba antes. Tiene mucho impacto en la productividad en la medida cómo tú puedas acondicionar un espacio a un proceso específico, que estés desarrollando como empresa".

—¿Qué tipo de "entretenciones" están incorporando las empresas?

"En el actual entendimiento del trabajo, las oficinas incorporan espacios mucho más flexibles, acogedores y colaborativos. Estos espacios no sólo son entendidos como espacios de 'distracción', sino que corresponden a las nuevas formas de trabajar. Dependiendo de la identidad de cada empresa, podemos encontrar distracciones más lúdicas y otras más tradicionales. Nosotros hemos incorporado desde gimnasios, salas de juegos interactivas, salas de cine, sala de lectura y biblioteca, espacios privados para hablar por teléfono, salas de siesta, sala de masajes, entre otros, aunque lo más raro que hemos hecho fue un sendero de patinaje en Bostus, una empresa de desarrollo de sistemas".

—¿Qué piden las empresas?

"La principal tendencia es el paso a las plantas libres, la reducción de espacios individuales en pos de espacios de encuentro, y espacios de encuentro con distintas características, desde unos más informales para el café, salas de juegos y salas de reuniones con distintos niveles de formalidad. Las oficinas están mucho más informales y lúdicas, como que 'los ejecutivos se están sacando la corbata'".

"Además, hay un mayor impacto de la imagen corporativa dentro de las oficinas, las empresas buscan diferenciarse. Quieren que cuando el cliente llegue a la oficina, se acuerde de ella y que sea un momento grato. Que la oficina sea una instancia de comunicación de tu marca, de tu cultura y propuesta de valor".