BRUSELAS.- El Consejo Europeo de Bruselas, que debía pactar los presupuestos de la Unión Europea (UE) para el período 2014-2020 concluyó hoy en fracaso debido a las fuertes divergencias entre los socios comunitarios acerca de las prioridades de gasto para el bloque, informaron fuentes diplomáticas en la capital belga.
Tras dos jornadas de intensas negociaciones y reuniones bilaterales, el presidente del Consejo Europeo (CE), Herman Van Rompuy, determinó que no había visos de un acuerdo, por lo que tendrá que haber otra cumbre, previsiblemente en los primeros días del próximo año.
"Hay suficiente nivel de convergencia potencial como para que el acuerdo sea posible en enero", afirmó Van Rompuy durante la conferencia de prensa final, en la que también pidió a los países que "sean capaces de tender puentes".
Sobre la mesa ha quedado su último borrador sobre un presupuesto cifrado en torno a 973.000 millones de euros, que suponen un recorte de 80.000 millones de euros respecto a la propuesta inicial de la Comisión Europea (CE).
Pese a que el político belga tuvo que reelaborar la propuesta y hacer una nueva redistribución de los recortes para hacerlos menos penosos en agricultura y cohesión, los resultados no convencieron ni a los que se oponían a tocar esos capítulos (Francia, Italia o España) ni a los que consideraban que las reducciones eran escasas (Alemania, Reino Unido, Holanda, Suecia, Austria o Finlandia).
Los países no lograron ponerse de acuerdo ni sobre el montante de los recortes ni en la manera en que esas reducciones presupuestarias afectarían a los gastos de la Unión en los próximos siete años.