LA PAZ.- El Gobierno de Bolivia anunció hoy que a mediados de este mes entregará en la frontera a las autoridades de Chile más de 500 vehículos confiscados a contrabandistas y que fueron robados en el territorio chileno.
"En las próximas dos semanas vamos a devolver en la frontera de Chile más de 500 vehículos que nuestro Gobierno con la política de regularización de vehículos indocumentados ha logrado incautar", informó el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana.
Los vehículos serán entregados al Gobierno de Chile para que, a su vez, éste los devuelva a las víctimas del robo, dijo el alto funcionario boliviano en declaraciones a los medios estatales.
Destacó que en los últimos dos o tres años Bolivia "gastó ingentes cantidades de recursos económicos" y modificó la posición territorial de los militares de su Ejército "para contener el flujo de contrabando de Chile hacia Bolivia".
"Hemos detenido miles de vehículos de contrabando, de mercadería ni que se diga. El trabajo de la Aduana siempre es insuficiente porque Chile ofrece un boquete al contrabando y no hay voluntad del Gobierno de Chile para resolver el problema", sostuvo Quintana.
A juicio del ministro, el hecho de que miles de vehículos robados en territorio chileno lleguen hasta la frontera "pone en tela de juicio la supuesta capacidad institucional de los Carabineros de Chile para luchar contra los ilícitos en su territorio".
Quintana habló del tema a propósito de los tres soldados de su país detenidos en Chile desde el viernes 25 de enero, acusados de pasar la frontera con un fusil mientras perseguían contrabandistas.
"Este tipo de episodios genera rentabilidad política para el Gobierno chileno. Detener a tres soldados bolivianos es la gran proeza miliar del Gobierno de Chile para mostrar a sus ciudadanos que tienen unas Fuerzas Armadas eficientes", agregó.
Acusó a Chile de no ayudar, ni facilitar el control del contrabando hacia Bolivia que, al contrario, hace grandes esfuerzos en la movilización de militares porque esa actividad ilegal le causa al país un daño de entre US$ 500 y US$ 600 millones anuales.
El programa de regularización de vehículos sin papeles en Bolivia fue aplicado en 2011 a 70.000 unidades, proceso del que se excluyeron otros 8.000 detectados en un registro de solicitudes debido a que fueron denunciados por robo en países vecinos.
La Aduana boliviana informó hace cuatro meses que la Policía decomisó en concreto un total de 1.658 vehículos robados en Chile, Brasil, Argentina, Perú y Paraguay, y que hacen los trámites judiciales y aduaneros para la devolución.