SANTIAGO.- El dólar cerró este viernes estable, siguiendo la relativa calma de los mercados globales, en una nueva jornada con bajo volumen de operaciones debido a la temporada de vacaciones.
Al final de la sesión, la divisa estadounidense se cotizó en $471,00 comprador y $471,50 vendedor, registrando un incremento de $0,5 con respecto al cierre de ayer.
"Toda la semana el mercado se mantuvo con muy poco movimiento, lo cual es típico en la temporada de verano y sobre todo en febrero, por lo tanto, lo único que puede mover al tipo de cambio son los mercados externos que, en esta ocasión, también estuvieron casi planos", dijo un operador.
Los inversionistas han respetado por más de cinco meses la resistencia de 470 unidades para el peso. Consideran que, si se rompe ese nivel, se abre la puerta a una posible intervención del Banco Central para contener la fortaleza de la moneda local.
Las bolsas de valores europeas cerraron el viernes con una leve caída, mientras que los principales índices de Wall Street operaban estables, en medio de datos mixtos de la economía de Estados Unidos.
La actividad manufacturera en la mayor economía del mundo cayó un 0,4% en enero, pero la confianza del consumidor subió sobre lo esperado en febrero.
En tanto, el precio del cobre, principal envío del país y cuyo desempeño suele estar ligado al peso, cayó levemente en Londres.
Los mercados se mantienen expectantes a las conclusiones de la cumbre del G-20 y las medidas que se adopten frente a la llamada "guerra de divisas", donde algunos países debilitan sus monedas para ganar competitividad y crecer, perjudicando a otras naciones.
Las transacciones electrónicas en la plaza local llegaron a 1.060 millones de dólares contra los 825 millones negociados en la jornada anterior.