El nuevo Volvo S60.
AFPBEIJING.- Volvo Cars, la compañía automotriz sueca propiedad de Zhejiang Geely Holding Group Co., obtuvo la aprobación del principal organismo planificador de la industria de China para empezar a fabricar vehículos en el país, dijeron tres personas familiarizadas con el tema.
La Comisión Nacional de Reforma y Desarrollo autorizó hace poco el plan de producción de Volvo, dijeron las personas, que exigieron conservar el anonimato porque el proceso es confidencial. El Consejo de Estado, o gabinete, tiene que dar la aprobación final, si bien las probabilidades de un rechazo son insignificantes, dijo una de las personas.
La aprobación es un paso muy esperado para el presidente de Geely, Li Shufu, que apostó a que tendría una ventaja en su país de origen cuando compró Volvo en 2010 y comprobó luego que el gobierno chino sometía a la marca sueca a los mismos procedimientos de regulación que a todas las compañías automotrices extranjeras. Hasta Jaguar Land Rover, de Tata Motors Ltd., que estableció una empresa china con Chery Automobile Co. el año pasado, tardó menos en obtener permiso para producir autos en el país.
De todos modos, la autorización allana el camino para que Geely, de Li, ofrezca autos Volvo a precios más bajos porque los vehículos fabricados en China no están sujetos al derecho de importación de 25% del país. El gobierno exige que las empresas automotrices extranjeras trabajen con compañías chinas en la producción de autos.
Los dos llamados que se hicieron a la oficina de medios de la Comisión Nacional de Reforma y Desarrollo en Beijing no obtuvieron respuesta. Un vocero de Volvo China se negó a hacer declaraciones sobre un informe anterior de China Car Times en el que se decía que Volvo había obtenido autorización de la comisión para fabricar autos en el país.
Ventas de Volvo
Las ventas de Volvo en China crecieron 31%, a 8.719 unidades en los dos primeros meses del año, con lo que el país asiático desplazó a Suecia como segundo mayor mercado de la compañía automotriz, sólo por debajo de los Estados Unidos. Li dijo este mes que confiaba que el crecimiento de las ventas de Geely superaría el de la industria automotriz china, que podría expandirse alrededor de 10% este año.
En la actualidad, Volvo vende siete modelos en China, cuyos precios van de los 249.000 yuanes (US$ 40.200) por el C30 hasta 661.000 yuanes (US$ 106.400) por el sedán C70, según el sitio web de la compañía.
La empresa automotriz ha dicho que apunta a abrir su primera planta china en Chengdu, la capital de la provincia de Sichuan, en el sudoeste del país.
Volvo designó el mes pasado a Lars Danielson, que tenía a su cargo el establecimiento de la planta de Chengdu, como vicepresidente de operaciones en China. Reemplazó a Freeman Shen, que se desempeñaba en ese puesto desde octubre de 2010.