El presidente de la Confederación de Trabajadores del Cobre, Cristián Cuevas.
La SegundaSANTIAGO.- La Confederación de Trabajadores del Cobre (CTC) acudió hoy a las oficinas corporativas de Codelco en todo el país, para hacer entrega de una carta dirigida a Thomas Keller, presidente de la minera estatal, a través del cual dieron por iniciada una negociación con la cuprífera.
En la misiva entregada por la CTC, –que representa a más de 40 mil trabajadores del cobre pertenecientes a empresas contratistas de Codelco–, aseguran contar con "una alianza amplia con trabajadores de planta, portuarios y organizaciones de la minería privada para exigir un nuevo trato con los trabajadores que producen la riqueza de este país".
En el petitorio, firmado por Cristián Cuevas, presidente de la CTC, solicitan además que Codelco, "en su calidad de representante del Estado en el Consejo Minero, exija asimilar a este Acuerdo los contratos de trabajo de los subcontratados de la minería privada".
Según explicaron, esta demanda de negociación tiene como "ejes principales al término de la subcontratación", –a la que ven "como forma de precarización del trabajo"–, la "renacionalización de los recursos naturales y a mejoramientos sustanciales en las remuneraciones y condiciones de trabajo establecidas en el Acuerdo Marco, firmado el 2007 con Codelco y las empresas contratistas, tras una huelga de 37 días, que logró paralizar gran parte de la estatal".
En efecto, según explicaron a Emol desde la CTC, tras el acuerdo de 2007, ellos han buscado renegociar los puntos que consideran que no se han cumplido, cada dos años.
Consultada la Confederación respecto de cuáles son los plazos que ellos han definido para recibir una respuesta desde la estatal cuprífera, aseguraron que esperarán un par de semanas para que se pueda definir una mesa de negociación, y que si ésta no se logra, la Confederación llamará a una huelga "a nivel nacional".
Según explicaron a través de un comunicado, con esta negociación esperan que se logre un "mejoramiento integral de la calidad de vida de los trabajadores contratistas y subcontratistas, abordando las necesidades de vivienda, previsión, salud y educación, con políticas concretas y en materia de remuneraciones", a "una política de remuneraciones que reconozca el aporte fundamental de los trabajadores contratistas y subcontratistas a la producción". A ello destacaron el llamado de "A Igual Trabajo, Igual Salario, amparada en los Convenios Internacionales de la OIT respecto al trabajo decente".