PARÍS.- El Gobierno francés mantuvo hoy su previsión de crecimiento de un 0,1% este año y su voluntad de no aplicar nuevos ajustes, pese a los augurios del FMI y de los institutos de coyuntura que anuncian una recesión.
El Ejecutivo francés, que había abandonado el objetivo de cumplir con el límite europeo de déficit del 3% del Producto Interior Bruto (PIB) en 2013 para evitar un efecto recesivo, señaló que este año se quedará en un 3,7% y que el próximo bajará al 2,9%, según el programa de estabilidad que va a negociar con la Comisión Europea (CE).
"No haremos ningún esfuerzo presupuestario suplementario en 2013 al margen del ya comprometido, considerable, de 30.000 millones de euros", señaló el titular de Finanzas, Pierre Moscovici, que insistió en sus demandas a Alemania para que ponga en marcha medidas que reactiven la actividad en la Unión Europea (UE).
"Francia se niega a añadir austeridad a la recesión. La austeridad no es una opción, la combatimos a escala europea desde el primer día. Por eso los países con excedentes deben contribuir al crecimiento y se lo he dicho a nuestros amigos alemanes", argumentó Moscovici en una entrevista publicada hoy por "Le Monde".
Sus declaraciones se conocieron poco antes de la presentación en Consejo de Ministros de las previsiones económicas del Ejecutivo.
El ministro francés advirtió de que la UE "se enfrenta a un movimiento de euro-escepticismo e incluso de rechazo", y en alusión a sus diferencias con Alemania afirmó que "Europa no debe ser un castigo, una coraza, un sufrimiento. Debe abrir perspectivas, estar a la altura del ideal que representa".
De acuerdo con las proyecciones presentadas la reunión ministerial de hoy, el Producto Interior Bruto de Francia progresará un 1,2% en 2014 y alcanzará una cadencia del 2 % a partir de 2015.
Eso choca con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que en sus previsiones publicadas ayer corrigió a la baja sus propios cálculos sobre la economía francesa, ya que estima que el PIB caerá un 0,1% este ejercicio y sólo recuperará un 0,9 % el próximo.
Para el Gobierno francés, con el crecimiento que espera la deuda pública seguirá aumentando del 90,2 % del PIB en 2012 al 93,6% en 2013 antes de tocar techo en 2014 con un récord del 94,3 %, antes de disminuir al 92,5% en 2015.
En cuanto al paro, el Ejecutivo considera alcanzable la meta fijada por el presidente socialista, François Hollande, de invertir la curva ascendente antes de finales de año, en concreto a partir del cuarto trimestre.
La tasa de desempleo, que había subido hasta el 10,6% en el cuarto trimestre de 2012, según el FMI crecerá al 11,2% en 2013 e incluso al 11,6% en 2014.