NICOSIA.- El Parlamento chipriota comenzó el debate sobre el paquete de ajuste acordado con la troika a cambio del rescate financiero.
Al comienzo del debate, el líder del partido conservador DISY, Averof Neofitu, aseguró que su grupo apoyará el plan, pero anunció que pedirá recortes salariales en el sector público mayores de lo previsto para mejorar la situación de las arcas del Estado.
El voto se presenta ajustado, pues, según los pronunciamientos de los distintos partidos a lo largo de la jornada de ayer, el paquete de medidas contará exactamente con la mayoría necesaria de 29 votos, siempre y cuando ninguno de los diputados del Gobierno y los partidos que le apoyan se salga de filas.
Con seguridad votarán en contra 27 parlamentarios: los 19 diputados del partido comunista AKEL, que lideró el anterior Gobierno y que se ha mostrado a favor de abandonar el euro, los cinco socialdemócratas de EDEK, uno independiente, un ecologista y uno de los dos diputados del partido europeo EVROKO.
A favor se han pronunciado los veinte diputados del conservador DISY del presidente, Nikos Anastasiadis, su aliado de centro DIKO, con ocho parlamentarios y, en principio, el segundo de los dos representantes de EVROKO, sumando en total los 29 de la mayoría
absoluta.
La aplicación de este paquete de ajustes es requisito imprescindible para obtener el rescate de 10.000 millones de euros de la troika formada por la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional.
El plazo de amortización será de 22 años, a un interés de entre el 2,5% y el 2,7%.
Entre las medidas, cuyo objetivo es alcanzar un superávit primario del 3% (excluido el pago de los intereses de la deuda) en 2017 y del 4% en 2018, figura una subida del impuesto sobre el valor añadido del 17% al 18% en 2013 y al 19% en 2014, y del IVA reducido del 8% al 9%, a partir del próximo año.
Amén de un programa de privatización de empresas públicas y semipúblicas, contempla una serie de medidas fiscales, como el aumento del impuesto de sociedades que subirá del 10% al 12,5% este año, y al 30% el de las personas físicas.
A los empleados públicos les aplicará este año un recorte salarial progresivo, que comienza con un 0,8% para los salarios inferiores a los 1.000 y alcanza el 14,3% para los superiores a los 4.000 euros de hasta el 14 3%; en 2014, la reducción será de un 3%
independientemente de los ingresos.
Además, se eliminarán al menos 4.500 empleos públicos.