Dilma Rousseff ordenó pesquisar quién dio origen al rumor.
AFP (archivo)BRASILIA.- La Policía Federal de Brasil recibió una orden directa de la Presidenta de ese país, Dilma Rousseff, para investigar el origen de un rumor que llevó a miles de brasileños de escasos recursos a acudir a las sucursales de un banco estatal a pedir el pago de un bono familiar mensual.
El pánico fue generado por una versión que aseguraba que los pagos del programa Bolsa Familia serían eliminados. Multitudes hicieron fila durante el fin de semana en las subsidiarias de la Caixa Economica Federal para exigir su dinero.
El rumor se extendió con enorme rapidez mediante mensajes de texto en celulares, antes de que las autoridades convencieran a los ahorrantes de que era falso.
Beneficiarios molestos rompieron puertas de vidrio y cajeros automáticos en algunas sucursales del banco, en un estallido que recordó las escenas caóticas de bancos atiborrados de gente durante las crisis financieras sufridas hace dos décadas por el gigante sudamericano.
El gobierno reaccionó rápidamente y permitió que los estipendios programados para más adelante este mes fueran pagados en los cajeros automáticos durante el fin de semana, a fin de detener el pánico.
"Este dinero del gobierno es sagrado. Garantizamos estos pagos. No cerraremos Bolsa Familia", prometió Rousseff en un discurso en un astillero, calificando el rumor de "inhumano".
"Pusimos a la Policía Federal en el caso para hallar quién inició este rumor que pretendía hacer enojar a brasileños que han salido de la pobreza extrema por 10 años", declaró.
El programa de transferencias de dinero a familias, bajo la condición de que envíen a sus hijos a la escuela y los vacunen, ha ayudado a sacar a 30 millones de brasileños de la pobreza durante una década.
La política social de Brasil ha ayudado a mantener un amplio apoyo al gobernante Partido de los Trabajadores de Rousseff y es una plataforma clave en sus planes de reelección el próximo año.
Beneficios masivos
El vicepresidente de Caixa Economica, José Urbano Duarte, dijo que cerca de 1 millón de familias tuvieron acceso a sus pagos de la Bolsa Familia este fin de semana.
Cerca de 50 millones de brasileños, casi un cuarto de la población del país sudamericano, son beneficiados por el programa que paga un mínimo de 70 reales (34,42 dólares, unos 13.000 pesos chilenos) mensuales a familias que califiquen.
La deteriorada situación fiscal de Brasil y la fuerte carga impositiva han llevado a distintos economistas a abogar por recortes en el gasto público, para permitir mayor inversión e impulsar el lento crecimiento en la séptima mayor economía del mundo.