Wall Street abre su semana bursátil con una sólida subida del 1,06%

NUEVA YORK.- Tras un fin de semana más largo de lo habitual, Wall Street arrancaba hoy la semana con una decidida tendencia alcista y el Dow Jones de Industriales subía el 1,06 % impulsado por el avance de las bolsas mundiales y un nuevo dato positivo sobre el mercado de la vivienda de EE.UU.

Media hora después del inicio de la sesión, ese índice sumaba 162,22 puntos para situarse en las 15.465,32 unidades, al tiempo que el selectivo S&P 500 subía el 1,17% (19,33 puntos) hasta 1.668,93 y el índice compuesto del mercado Nasdaq el 1,29% (44,57 enteros) para ponerse en 3,503,71 unidades.

Con esas marcadas ganancias arrancaba Wall Street la semana bursátil, que será más corta de lo normal por la celebración el lunes en Estados Unidos del Día de los Caídos, que mantuvo cerrados los mercados de valores y de materias primas de este país.

El parqué neoyorquino se contagiaba de los números verdes con los que cerraron las bolsas asiáticas y que experimentaban a esta hora las bolsas europeas, con subidas que rondaban en su mayoría el punto porcentual.

El impulso venía además de la mano del índice Case-Shiller que elabora Standard & Poor's, que reveló que los precios de las viviendas unifamiliares en las grandes ciudades de EE.UU. registró en marzo su mayor subida interanual en siete años.
 
A la espera también de que se conocieran los datos sobre la confianza del consumidor que anuncia hoy The Conference Board, todos los componentes del Dow Jones subían a esta hora a excepción del fabricante de productos para el hogar Procter & Gamble (-0,18%).

El lado positivo de la tabla lo encabezaban la farmacéutica Merck (3,03%), la tecnológica Cisco (2,04%), la aseguradora UnitedHealth (2%) y otra casi veintena de compañías con subidas superiores al punto porcentual.

Fuera de ese índice brillaban las joyerías Tiffany's, que se disparaban el 5,29% tras haber anunciado unos resultados mejores de lo previsto.

En otros mercados, el petróleo de Texas subía a 95,62 dólares por barril, el oro descendía a 1.382 dólares la onza, el dólar subía frente al euro (que se cambiaba por 1,2905 dólares), y la deuda estadounidense a diez años subía hasta el 2,07%.