La Canciller alemana Angela Merkel (a la derecha) toca un auto eléctrico Mercedes Benz E-drive junto al CEO de Daimler AG, Dieter Zetsche en una conferencia sobre movilidad eléctrica, ayer lunes 27 de mayo, en Berlín.
AFPFRANKFURT.- Mientras busca un nuevo auto, Joachim Sander piensa que esta vez podría elegir uno eléctrico. La canciller alemana Angela Merkel necesitará la ayuda del asesor de tecnología de la información de Frankfurt –y de muchos como él- para cumplir con su palabra.
Tres años después que Merkel dijera que quiere ver 1 millón de autos a batería en las calles de Alemania en 2020, ha habido escasos progresos: el 1º de enero sólo 7.114 de los 43,4 millones de vehículos de pasajeros de Alemania eran eléctricos. Incluso si se suman los híbridos, que utilizan tanto electricidad como combustibles convencionales, la cifra llega apenas a 72.109.
"Nuestros planes y proyectos son ambiciosos pero tenemos buenas probabilidades de cumplirlos", declaró ayer Merkel en una conferencia del gobierno sobre vehículos eléctricos en Berlín.
Los escépticos dicen, aun cuando las automotrices alemanas se preparan para lanzar una cantidad de autos eléctricos, que es improbable que el país alcance la meta de Merkel. Un objetivo de 600.000 vehículos eléctricos e híbridos plug-in en Alemania para 2020 sería más realista, opinó Thomas Schlick, socio de la consultora Roland Berger.
"Tras todo el bombo político de que pronto todos manejaremos un auto eléctrico, hay cierta decepción", señaló Schlick. "No va a haber un salto repentino sino una evolución gradual, tal como ocurre con todas las tecnologías nuevas".
Como los automovilistas de todas partes, los alemanes tardan en aceptar los vehículos eléctricos. Los autos cuestan 10.000 euros (US$ 12.900) más que las versiones similares a gasolina. La recarga lleva tiempo y es difícil para los habitantes de la ciudad que no tienen garaje, de modo que a muchos compradores les preocupa quedarse sin energía a mitad de camino. Y el temor por el alza del precio del petróleo se ha calmado con el uso de nuevos recursos energéticos.
Confianza para cambiar
"Los consumidores sólo comprarán autos eléctricos si tienen un precio razonable y hay suficiente infraestructura de recarga", dijo Siim Kallas, comisario de transporte de Europa, en la conferencia de Berlín. "Todavía no tienen la suficiente confianza para cambiar".
Roland Berger rebajó su pronóstico de producción mundial de vehículos eléctricos e híbridos plug-in en 194.000 vehículos a 1,1 millón de autos hasta 2015. Alemania aportará 205.000 de ellos, lo que la convierte en el tercer productor, afirma la consultora. Gracias a la versión plug-in del Prius de Toyota Motor Corp. y el i-Miev de Mitsubishi Motors Corp., Japón será el líder en la producción de vehículos eléctricos con 283.000 autos, seguido por los Estados Unidos con 267.000 vehículos, según estos cálculos.
Las automotrices alemanas se aprestan a hacer su parte. Daimler AG, Bayerische Motoren Werke y Volkswagen AG planean presentar 16 nuevos modelos eléctricos o híbridos para fin del año que viene, según Henning Kagermann, que tiene a su cargo la iniciativa de vehículos eléctricos de Merkel.
"Los clientes tendrán abundantes opciones", dijo en entrevista telefónica Kagermann, ex máximo responsable ejecutivo del fabricante de software SAP AG.