Bolivia inicia campaña para exportación e industrialización de la hoja de coca

LA PAZ.- Bolivia organizó hoy un foro internacional con el que busca iniciar una campaña internacional para la exportación e industrialización de la hoja de coca pese a la prohibición de convenios internacionales antidrogas desde 1961.

"Este cuarto foro internacional se desarrolla después de que Bolivia logró la gran conquista a nivel internacional de la despenalización del acullico", dijo el ministro boliviano de Gobierno (Interior), Carlos Romero.

Agregó que la coca es parte de la cultura ancestral de Bolivia. Romero hizo defensa del arbusto por su aporte a la medicina y otros usos industriales.

El holandés Martin Jelsma, uno de los 11 expertos internacionales llegados a La Paz, instó a la revalorización de la coca y a hacer campaña para sacarla de la lista de sustancias prohibidas por la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE).

"Hay la urgencia de un nuevo marco jurídico internacional que permita explorar y abrir nuevos mercados para la coca, y para la regulación del mercado de la marihuana", dijo.

Jelsma trazó una hoja de ruta para conseguir los cambios propuestos en la reunión de la JIFE en Austria en marzo próximo, en una cumbre antidrogas de 2015 en Panamá y la reunión sobre drogas de Naciones Unidas en 2016.

"Pero se requiere bastante solidaridad (de la comunidad internacional) y de alianzas, sino no habrá cambios históricos", advirtió.

El foro de la coca también apunta a trazar "caminos de encuentro entre los valores, el desarrollo de uso lícito y la nueva experiencia de control social que se implemente para la reducción de cultivos excedentarios de coca en Bolivia", según el Consejo Nacional de la Lucha Contra el Tráfico Ilícito de Drogas de Bolivia (Conaltid).

Argentina, Perú y Ecuador fueron sedes de los anteriores foros de coca. En el cuarto foro Bolivia hará propuestas para el uso medicinal de la hoja.

Bolivia tiene 25.300 hectáreas de cultivos de coca, según el último monitoreo satelital de Naciones Unidas. Según la ley antidrogas, en vigor desde 1988, está permitido el cultivo 12.000 hectáreas, el resto deberá ser sujeto de la erradicación manual.