SAO PAULO.- La empresas del magnate Eike Batista, que llegó a ser el hombre más rico de Brasil, cerraron en rojo en el segundo trimestre de 2013, lideradas por la petrolera OGX, que registró pérdidas por más de US$ 2.000 millones.
Entre todas las empresa de Batista las pérdidas llegan a 5.600 millones de reales (US$ 2.394 millones). Del total, OGX, considerada la joya del grupo, perdió 4.720 millones de reales (US$ 2.017 millones).
El resultado de la OGX respondió "principalmente a los gastos por 3.600 millones (de reales) referentes a la provisión para la perdida ('impairment') de las inversiones realizadas en los campos de Tubarao Azul, Tubarao Areia, Tubarao Gato y Tubarao Tigre", explicó la empresa en una nota a inversionistas divulgada este jueves.
La empresa anunció recientemente que suspendería los planos de inversión en esos campos.
Además tuvo pérdidas de 982 millones de reales (US$ 419 millones) por pozos secos y por la desvalorización del real.
En el primer semestre, las empresas del grupo X acumulan una pérdida de 6.740 millones de reales (US$ 2.881 millones), según la consultora Economatica, citada en el sitio G1.
En el primer semestre de 2012, las pérdidas fueron de 1.120 millones de reales (US$ 574 millones al cambio promedio del año). Las principales empresas del grupo acumulan cinco trimestres con saldo rojo.
Esta semana, el control de LLX fue transferido a la estadounidense EIG Management Company en un acuerdo de 1.300 millones de reales (US$ 555 millones).
Asimismo, en julio, Batista renunció al consejo de administración de MPX, después de un acuerdo con la alemana E.ON que debe asumir el control de la empresa.
En poco más de un año el grupo EBX pasó de estar valorado en 30.000 millones de dólares a un tercio de ese valor. Forbes lo definió como "el mayor perdedor de 2012".