TOKIO.- El déficit comercial de Japón prácticamente se duplicó en un año, pese a la mejora de las exportaciones, debido al aumento de la factura energética por la debilidad del yen, anunció el gobierno este lunes.
El déficit comercial se elevó a 1.024 billones de yenes (US$ 10.500 millones), en julio, casi el doble que en el mismo periodo de 2012 (528.500 millones de yenes).
Se trata del 13º mes consecutivo de déficit del país, el periodo más largo en 30 años, anunció el ministerio de Finanzas.
El aumento del 12,2% de las exportaciones en julio gracias a la fuerte demanda de Estados Unidos, China y Europa, en comparación con el año pasado, no ha podido cubrir el déficit comercial.
"El déficit es mucho mayor de lo esperado porque la debilidad del yen encarece las importaciones de energía", explicó Hideki Matsumura, analista del Japan Research Institute.
"Pero los datos muestran que las exportaciones se están recuperando gracias a la debilidad del yen y a la fuerte demanda del mercado estadounidense", agregó.
Según este analista, el déficit irá reduciéndose a medida que las exportaciones aumenten y superen a las importaciones gracias, precisamente, al impacto del yen.
Y es que un yen débil contribuye a aumentar el valor de las exportaciones en moneda extranjera cuando se cambia a la divisa nacional, lo que favorece a grandes empresas exportadoras como Toyota y Sony.
El valor de las exportaciones al mercado estadounidense aumentó un 18,4% con respecto al año pasado y un 16,6% al de la eurozona.
Las exportaciones a China crecieron 9,5% tras la disputa territorial entre Tokio y Pekín que volvió a surgir el año pasado, dañando los lazos comerciales de los dos gigantes asiáticos.
El yen se ha devaluado cerca del 20% con relación al dólar desde el año pasado, contribuyendo a mejorar la competitividad de los productos japoneses en el extranjero y los ingresos obtenidos en divisas.
Sin embargo, la factura energética de Japón también ha aumentado desde el cierre de los reactores nucleares del país tras la crisis de Fukushima en marzo de 2011 y que le ha obligado a utilizar combustibles fósiles que compra en el extranjero.
Las altas temperaturas que se han registrado este verano han aumentado la demanda, aseguran los analistas.