Se reduce número de prostíbulos en Nevada porque internet interfiere con ese oficio

MOUND HOUSE, NEVADA.- En una sala en penumbras amueblada con sillones de terciopelo rojo y un caño para strippers, Brooke Taylor promociona sus virtudes.

"Ofrezco muchos más especiales, descuentos e incentivos para que vengan a verme", dijo Taylor, de 32 años, una prostituta de cabello castaño que lleva un vestido corto color verde en el Moonlite Bunny Ranch de las afueras de Carson City, Nevada. "La gente busca ofertas".

Los prostíbulos legales de Nevada, que se instalaron durante el auge de la minería de la plata a mediados del siglo XIX, están desapareciendo. Actualmente son unos 19, mientras que llegaron a ser 36 en 1985, según George Flint, lobbista de la industria. Muchos fueron las empresas de más alto perfil de esa región de escasa población, y su decadencia afecta los ya exigidos presupuestos de los condados y marca el fin de las instituciones locales.

La culpa la tienen la débil economía del estado, la menor cantidad de clientes por el alto costo del combustible que deben pagar los camioneros y el uso creciente de Internet para arreglar encuentros, dicen los administradores.

"Muchos de nuestros clientes no tienen los ingresos disponibles que tenían hace seis años o cinco años", explicó Susan Austin, de 63 años, la madama del Mustang Ranch de Sparks, a unos 24 kilómetros de Reno. "Los que sí pueden venir no gastan tanto como antes".

Unos pocos y alejados locales

Los últimos años no han sido amables con Nevada. La recesión de 18 meses que se inició en diciembre de 2007 todavía afecta al estado. Este tuvo el índice de desempleo más alto de los Estados Unidos en julio, de 9,5%, frente a un 7,4% para el total del país, según la Oficina de Estadísticas Laborales de los EE.UU. Desde el último trimestre de 2007, la salud económica del estado decayó un 46%, según la Evaluación Económica de los Estados de Bloomberg. Esta situación es la segunda peor de la nación después de la de Nuevo México.

La mayoría de los prostíbulos se hallan en zonas rurales con pocos habitantes y empleadores. Si Manhattan tuviera la densidad de Lyon County, donde se encuentra el Moonlite Bunny Ranch, la población sería de 594 personas.

Los prostíbulos le pagan poco al estado, ya que envían la mayor parte de sus impuestos y aportes a los condados que los supervisan.

Cada dólar cuenta. En Lyon County, donde los mayores empleadores privados son un centro de distribución de Amazon.com Inc. y un local de Wal-Mart Stores Inc., los ingresos totales se redujeron de US$ 33 millones en el año fiscal 2009 a US$ 29 millones en 2012, según Josh Foli, su revisor de cuentas. En los últimos cinco años, el personal del condado sufrió un recorte del 25% aproximadamente, informó Foli.

En el año fiscal que terminó el 30 de junio, los cuatro prostíbulos de Lyon le pagaron US$ 369.600 en derechos de licencia y US$ 17.800 por permisos de trabajo para las prostitutas, señaló Foli. Los prostíbulos también le pagan al condado impuestos a la propiedad, además de abonar un impuesto a las ventas al estado por productos promocionales como las camisetas.