GINEBRA.- Los bancos suizos con clientes estadounidenses, que posean en ellos cuentas no declaradas al fisco de Estados Unidos, tendrán que pagar más de 1.000 millones de dólares de multas en virtud del acuerdo entre Washington y Berna, según analistas citados por la prensa helvética.
La prensa suiza comenta hoy el acuerdo con EE.UU., que anunció ayer el departamento de Justicia de ese país, para combatir la evasión de impuestos mediante cuentas secretas en el exterior y alentar a aquellos estadounidenses que se han escudado en esas cuentas a que resuelvan sus problemas tributarios con el Gobierno de EE.UU.
El entendimiento concluye un litigio fiscal de más de cuatro años entre ambos países, el que estalló cuando las autoridades de EE.UU. reunieron evidencias de que los bancos suizos albergaban depósitos por los que sus ciudadanos no pagaban impuestos.
Según detalles ofrecidos hoy por la ministra de Economía de Suiza, Eveline Widmer-Schlumpf, los bancos suizos han sido divididos en cuatro categorías, que van desde 14 establecimientos que tienen investigaciones penales en curso en EE.UU. hasta los que tendrán que incorporarse a un programa de regularización que les permitirá evitar la vía judicial a cambio de importantes multas.
La primera categoría, a la que corresponden los bancos actualmente investigados por la Justicia estadounidense, no podrán acogerse a ese programa y deberán negociar con distintos fiscales las penas que recibirán.
En la segunda categoría entrarán todo el resto de bancos helvéticos con clientes estadounidenses.
Por las cuentas no declaradas abiertas antes del 1 de agosto de 2008 deberán pagar el 20% de la suma total bajo gestión, mientras que para las cuentas abiertas después de esa fecha, pero antes del final de febrero de 2009, la pena se elevará al 30%.
Las cuentas creadas posteriormente sufrirán una multa equivalente al 50% de su importe total.
La fecha límite -febrero de 2009- coincide con la revelación de que el banco UBS -el más importante de la plaza financiera helvética- tenía miles de cuentas no declaradas de clientes estadounidenses, a los que incluso algunos de sus consejeros asesoraban sobre cómo evitar pagar impuestos.
Al comentar el acuerdo fiscal, la Asociación de Bancos de Suiza consideró hoy que el nivel de las multas se ubica en "el límite de lo aceptable".