Vagones cargados con acero industrial, en Tailandia.
EfeSAO PAULO.- La industria mundial del acero crecerá más de 3% al año en el corto plazo, pero a futuro avizora tormentas, a menos que aumente la demanda en el mundo desarrollado y China, que parecen incapaces de absorber una sobreoferta de millones de toneladas del metal, dicen miembros de la industria.
La Asociación Mundial del Acero, que agrupa a unas 170 compañías siderúrgicas, estima que la demanda global por el acero crecerá 3,1% en 2013 y 3,3% en 2014, cuando llegará a los 1.523 millones de toneladas, según las proyecciones divulgadas durante la conferencia anual que se inauguró en Sao Paulo este lunes.
El crecimiento fue de 2% en 2012.
Pese a la expansión, consultores y representantes de la industria señalan que hay actualmente unos 450 millones de toneladas excedentarias, que acarrean altos costos y configuran un panorama complicado, mientras las grandes economías aún sufren la crisis y países emergentes como Brasil crecen menos de lo esperado. "La industria está en un período muy difícil", declaró a la AFP Edwin Basson, director general de la Asociación.
"La demanda en muchos lugares del mundo ha crecido más lentamente de lo que esperábamos, y al mismo tiempo vemos que las condiciones de producción, en términos de productividad, también son difíciles en muchas partes del mundo", añadió. Por eso, sostuvo, "un 3% de crecimiento no es suficiente para ayudar a la industria a superar algunos de sus problemas estructurales", como la sobreproducción y altos costos.
Según cifras de la industria, de los 450 millones de toneladas de sobreoferta, unos 300 millones están en Asia.
André Gerdau Johannpeter, presidente del grupo siderúrgico brasileño Gerdau, coincidió durante su presentación en que la industria está "en un ciclo difícil", pero destacó que Brasil tiene la "gran necesidad" de invertir en infraestructura. Gigante en desarrollo con más de 200 millones de habitantes y séptima economía del mundo, Brasil acogerá el próximo año el Mundial de Fútbol y dos años después los Juegos Olímpicos en Rio de Janeiro. "Ahí hay oportunidades", declaró Gerdau.
Pero el mundo en desarrollo tampoco es la panacea para esta industria, que provee productos destinados a esas áreas, donde más se nota el crecimiento de los países: infraestructura, viviendas, vehículos, bienes de capital, sistemas de transporte, entre otras.
En los próximos 30 ó 50 años, señaló Basson, la tendencia es a una estabilidad en este tipo de construcciones y, por lo tanto, de la demanda. "A largo plazo, esta industria tendrá que lidiar además con el desafío de una situación más estable", alertó Basson, señalando que la industria deberá enfrentar el recorte de producción.
La crisis en el horizonte
El ministro de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior de Brasil, Fernando Pimentel, dijo que el panorama actual de la industria del acero es de "preocupación y desafíos". "La crisis en Europa y la lenta recuperación de Estados Unidos hacen que la demanda crezca más lentamente de lo que quisiéramos", añadió.
El ministro señaló que en los últimos diez años el mercado del acero se concentró en Asia, en especial en China, "lo que lo ha vuelto muy dependiente".
Brasil es el décimotercer exportador mundial de acero, según datos del Instituto Acero Brasil. Es además uno de los mayores productores mundiales de mineral de hierro, materia prima para la elaboración de acero.
Según datos de Worldsteel, la demanda por acero en China crecerá 6% en 2013, pero sólo un 3% en 2014. En Estados Unidos, en cambio, crecerá sólo 0,7% en 2013 después de haberse expandido 7,8% en 2012.
Una medida para estimular el consumo de acero y aumentar la demanda es a través de programas de construcción de viviendas o de infraestructura, señaló Pimentel.
Sigurd Mareels, director de la consultora McKinsey & Company, alertó: "El sector dio un paso atrás en los últimos dos años. Necesitamos evaluar cómo el sector seguirá creciendo. El mercado no nos salvará".