PARÍS.- El ministro francés de la Reconstrucción Productiva, Arnaud Montebourg, subrayó que el grupo automovilístico PSA Peugeot Citroen seguirá siendo francés, aunque sin excluir una entrada en su capital de sus socios chinos.
"PSA seguirá siendo una empresa francesa,” subrayó Montebourg en una entrevista publicada hoy por "Le Parisien", al mismo tiempo que reconoció que se encuentra en "muy grave dificultad".
No obstante, al ser preguntado sobre si descarta una entrada de los chinos en su accionariado, puntualizó que esa no es su posición, y que lo que dice es que "la empresa seguirá en Francia y francesa".
Insistió en que el objetivo es que el fabricante de autos, que emplea a 100.000 personas en Francia consiga relanzarse y contratar de nuevo.
Un escenario a su juicio "posible" si se tiene en cuenta que el estadounidense General Motors -que controla el 7 % de PSA- pasó por una suspensión de pagos, redujo su plantilla en 28.000 trabajadores y ahora está contratando de nuevo.
En las últimas semanas ha habido rumores sobre la entrada en el capital de PSA de su aliado chino Dongfeng, con el que desde julio pasado puso en marcha su tercera planta de producción común en el complejo de Wuhan.