BUENOS AIRES.- Eric Francos, un médico francés de vacaciones con su mujer y sus dos hijos en Buenos Aires, fue arrinconado a un costado de una calle pública peatonal saturada de vendedores en el centro de esa ciudad, mientras sacaba billetes de US$ 100 de su riñonera, mientras cambistas ilegales atraían a la gente con gritos de "dólares, euros, cambio".
"Soy consciente de los riesgos, pero hasta ahora nunca he tenido problemas. Trato de ser cuidadoso", dijo la semana pasada Francos, quien proyecta recorrer los viñedos de la provincia de Mendoza, que se encuentra a una distancia de 1.100 kilómetros al oeste de la capital argentina y es famosa por su vino Malbec, mientras guardaba los pesos en el bolsillo delantero de sus pantalones. "Cambiar dólares en la calle vale la pena".
Turistas como Francos, que recibió 9,7 pesos por dólar en comparación con los 5,971 al tipo de cambio oficial, recurren al mercado negro para conseguir la moneda local y reducen hasta 40% los costos de sus vacaciones. También despojan al banco central de las reservas en moneda extranjera que el gobierno utiliza para pagar su deuda, que es la más cara de proteger de un impago en el mundo utilizando permutas de incumplimiento de pago.
Los visitantes que gastaron US$ 622 millones durante el segundo trimestre vendieron nada más que US$ 342 millones a través de los canales oficiales como los bancos, una caída de 48% respecto del mismo período el año anterior, según datos del gobierno.
El mes pasado, en un intento de obtener más entradas de dólares al país, el gobierno dijo que los argentinos que traigan moneda extranjera para pagar impuestos quedarán eximidos del requisito de un depósito bancario.
Caída de las reservas
Atraídos por una brecha cada vez mayor entre los tipos de cambio oficial e ilegal en tanto la presidenta Cristina Fernández de Kirchner ajusta los límites a las compras en moneda extranjera, los turistas están contribuyendo a la racha más prolongada de caídas de las reservas en por lo menos dos decenios y ayudando a reducir los dólares que están en manos del banco central, hasta un mínimo en seis años de US$ 33.050 millones.
"Las cifras muestran que los turistas están cambiando sus dólares en el mercado ilegal para aprovechar el tipo de cambio más alto", dijo en una entrevista telefónica desde Buenos Aires Belén Olaiz, que escribió un informe sobre el mercado ilegal para la firma investigadora Abeceb.com.
Las reservas cubren 27% de la deuda pendiente en moneda extranjera, el nivel más bajo en siete años, según Orlando Ferreres y Asociados.
Argentina no ha estado dispuesta a pagar los costos de financiamiento que son casi el doble de la tasa promedio correspondiente a los mercados emergentes para recurrir a los mercados de crédito mundiales desde su cesación de pagos de 2001 por US$ 95.000 millones de deuda. En 2010, Fernández ordenó al banco central pagar con reservas a los inversores que recibieron bonos en dos reestructuraciones.
Desde entonces, el gobierno hizo bajar más de US$ 39.000 millones los fondos del banco central para pagar deuda, lo cual contribuyó a una racha sin precedente de 12 meses seguidos de caídas en las reservas.
El país está utilizando reservas para reducir sus niveles de deuda, que han disminuido en los últimos años, dijo un funcionario del Ministerio de Economía con conocimiento directo del tema que pidió no ser identificado en razón de las políticas internas.