BEIJING- Cifras oficiales comunicadas este jueves en China mostraron un incremento en la inflación registrada en la segunda economía global durante el año que terminó.
En 2013, el índice de precios al consumo (IPC) creció 2,6% interanual, precisó la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE).
En diciembre, el IPC, principal barómetro de la inflación, subió 2,5% con respecto al mismo periodo del año anterior, por debajo del 3% de noviembre.
De esta manera, la inflación se desaceleró más bruscamente que lo esperado en ese mes y alcanzó un mínimo en siete meses, lo que redujo el temor a un ajuste de la política monetaria en momentos en que el Banco del Pueblo de China está limitando la liquidez bancaria.
Sobre la base de los datos publicados hoy por la ONE, el crecimiento anual del IPC chino, junto al alza registrada en diciembre, se sitúa muy por debajo del límite marcado por el Gobierno chino para ese año, fijado en 3,5%.
El costo de los alimentos, que representan un tercio de la compra habitual del consumidor chino, aumentó 4,1% interanual en diciembre, por debajo del 5,9% de noviembre.
Los precios de los productos no alimenticios crecieron 1,7% en diciembre, 0,1% más que el mes anterior.
El índice de precios al productor (IPP), que mide el crecimiento de los precios al por mayor, cayó 1,9% interanual en 2013.
En diciembre, el IPP bajó un 1,4 por ciento interanual, el vigésimo segundo mes consecutivo de descensos.
La economía china debería experimentar durante el presente año los efectos de los cambios impuestos por el gobierno comunista, que incluyen modernizaciones en el sistema financiero y la expansión del sector privado.