BRUSELAS.- La Unión Europea (UE) ha cerrado un acuerdo sobre la revisión de la directiva sobre Instrumentos Financieros en los Mercados, destinada a incrementar su seguridad y transparencia y a evitar la especulación con las materias primas.
El Ejecutivo comunitario, los Veintiocho y el Parlamento Europeo sellaron al filo de la media noche un principio de acuerdo sobre la nueva propuesta legislativa que sustituirá a las normas vigentes desde 2007, informó hoy la Comisión Europea en un comunicado.
El comisario europeo de Mercado Interior, Michel Barnier, afirmó que la nueva normativa "mejorará el funcionamiento de los mercados de capital en beneficio de la economía real" y permitirá recuperar la confianza de los inversores tras la crisis financiera de 2008.
Lamentó que el texto final no incluya un régimen de transparencia "más ambicioso" para los instrumentos financieros diferentes a las acciones, como los bonos o los derivados.
La reforma obligará a los mercados financieros "a dar un giro hacia plataformas multilaterales y bien reguladas", según Barnier, quien añadió que se aplicarán “estrictas reglas de transparencia" para evitar "el comercio oscuro de acciones y otros instrumentos".
El texto (MiFID II, de sus siglas en inglés) está en línea con los compromisos pactados en el G20 de instaurar la negociación obligatoria en el comercio de derivados, y también recoge la compensación fijada en el reglamento sobre la infraestructura de los mercados europeos.
Otro punto destacado de la reforma es la armonización de las normas para limitar las posiciones dominantes en los mercados de derivados y materias primas, con objeto de evitar la especulación.
"Por primera vez, la UE regulará las materias primas para evitar la especulación con los alimentos, que tiene efectos devastadores sobre los países pobres", afirmó en un comunicado la eurodiputada británica Arlene McCarthy, vicepresidenta del Comité de Asuntos Económicos del PE.
La normativa incluye asimismo índices de referencia para las negociaciones y compensaciones en los mercados de capitales, que favorecerán la "competencia, la eficacia y la seguridad", según la Comisión.
El acuerdo contempla "duras sanciones" para las firmas de inversión que incumplan la normativa, y establece un cuadro jurídico armonizado para las empresas de terceros países que operen en el mercado europeo.
También se prevé una mayor protección de los inversores mediante "normas más estrictas" para las empresas, así como una adaptación de la legislación a la evolución de la tecnología y al aumento de las transacciones informáticas, indicó el Ejecutivo comunitario.
En particular, se instaurará un sistema de control de la negociación y una exigencia de liquidez para las llamadas operaciones "de alta frecuencia", y se regulará el acceso directo al mercado a través de internet.
Aunque entre el 80 y el 90% de las órdenes en los mercados financieros se ejecutan a través de comerciantes de alta frecuencia, sólo un 20% de las transacciones registradas constan dentro de esta categoría, según la eurodiputada británica.
El nuevo sistema de control "limitará esta distorsión del mercado y reducirá el ritmo de las transacciones", afirmó McCarthy.