SAN JUAN.- La agencia crediticia Standard & Poor's revisará la calificación de la deuda de Puerto Rico con la intención de bajarla hasta el nivel especulativo, conocido como el de los "bonos basura" o "chatarra", con lo que se suma así a Moody's, que también estudia esa opción.
"El Estado Libre Asociado de Puerto Rico ha sufrido una debilidad económica prolongada, con un muy elevado nivel de desempleo, una disminución continua de población y altos niveles de deuda y pasivos de jubilación", argumenta la agencia.
En un informe emitido la noche de este viernes, se recuerda que la economía puertorriqueña se ha contraído todos los años desde 2006 (excepto en 2012) y señala que, "pese a los esfuerzos del nuevo Gobierno, creemos que los desafíos económicos persistirán en los próximos dos años".
"La tasa de desempleo es el doble de la media nacional (de EE.UU.), en el 14,7% a partir de noviembre de 2013, y se ha producido una fuga de residentes, especialmente de los jóvenes profesionales, en los últimos años", añade S&P, que teme que esa caída de la población reduzca en extremo la base imponible de la isla, la demanda de bienes y servicios, y la inversión de capital.
S&P también ha decidido revisar sus perspectivas para las calificaciones del estatal Banco Gubernamental de Fomento (BGF), de los privados OFG BanCorp, FirstBank y Santander, para pasarlas a negativas, debido a su alto grado de exposición a la deuda emitida por la isla y sus municipios.
Igualmente ha puesto en revisión a la baja la deuda emitida por el Sistema de Retiro de los Empleados público de Puerto Rico y la Autoridad para el Financiamiento de Infraestructuras, la del Distrito del Centro de Convenciones y la de Carreteras y Transporte.
En cambio, no ha modificado sus previsiones para la Corporación del Fondo de Interés Apremiante (COFINA) de Puerto Rico.
"Estas acciones siguen a nuestra colocación en revisión de la deuda del BGF con implicaciones negativas", al considera que su capacidad para "proporcionar liquidez a Puerto Rico se ha debilitado", explica el analista de S&P David Hitchcock en el informe.
Según indica, la agencia de calificación también ha decidido poner en revisión a la baja la nota que confiere a la deuda de diversas entidades públicas, por el riesgo de que la falta de liquidez del BGF lleve al Gobierno a desviar fondos de esas empresas para financiar las obligaciones generales de la isla.
"Creemos que el Estado Libre Asociado se basa principalmente en el BGF para sus necesidades de liquidez. En nuestra opinión, la capacidad del BGF para proporcionar liquidez se ha convertido en restringida", afirma S&P.
De hecho, esta agencia de calificación cree que el BGF, un organismo que se creó en la década de los 40 para gestionar las finanzas públicas de la isla, "podría tener liquidez limitada al final del presente año fiscal (30 de junio de 2014) si no tiene acceso a los mercados de deuda".
"Si bien creemos que el Estado Libre Asociado puede colocar una considerable emisión de bonos sobre los impuestos obtenido por las ventas a través de Cofina -continúa S&P-, en nuestra opinión, las condiciones actuales de mercado para emisiones de deuda de Puerto Rico requerirán rendimientos relativamente altos y un grupo limitado de compradores especializados".
S&P imita con esta revisión a Moody's, que en diciembre ya puso en revisión a la baja la calificación de la deuda de Puerto Rico. Ambas agencias, así como Fitch, mantienen la nota en el escalón previo al grado especulativo, lo que quiere decir que una bajada llevaría a la isla caribeña a entrar en el territorio de los "bonos basura".
Eso forzaría a muchos inversores a vender aceleradamente la deuda que tienen de Puerto Rico, que en conjunto asciende a unos 70.000 millones de dólares, de los que cerca de 600 son bonos de deuda municipal.
Esa deuda, exenta de impuestos federales, estatales y locales en EE.UU., está enormemente diseminada entre fondos de inversión estadounidenses, lo que ha mantiene en alerta a los mercados financieros.