PARÍS.- La Asociación de Defensa de los Accionistas Minoritarios (ADAM) manifestó su oposición a los planes del grupo PSA Peugeot Citroen de proceder a una ampliación de capital reservada a la compañía china Dongfeng y al Estado francés sin que se dé una igualdad de tratamiento a todos los tenedores de títulos.
La presidenta de la ADAM, Colette Neuville, explicó hoy a Efe que su intención es conocer las intenciones exactas de la familia Peugeot, accionista histórico de PSA, y de las otras dos partes con las que negocia esa operación, Dongfeng y el Estado francés, para que el resto de los accionistas puedan pronunciarse y eventualmente modificarla antes de la junta que se celebrará este semestre.
Neuville subrayó que "por ahora es muy vago" el proyecto que discuten esos tres, más allá de saberse que su intención es que al final de la ampliación de capital cada uno de ellos tenga el 14 % del capital, y en particular no se sabe si comparten "una estrategia a largo plazo", que a su juicio es lo fundamental.
Dijo que no pone en duda la necesidad de proceder a una ampliación de capital -"lo contrario sería suicida"- ni tampoco la pertinencia de que Dongfeng entre en el accionariado, pero a su juicio eso tendría que hacerse sin reducción de precio, para que el resto de los accionistas no salgan perjudicados.
Más reticente se mostró con la intención del Gobierno francés de hacerse con una parte equivalente de los títulos de PSA, ya que "la entrada del Estado va a hacer huir a ciertos inversores e impedir alianzas con otros socios". A ese respecto, señaló que los poderes públicos no tienen como único interés una estrategia empresarial de largo plazo, sino que se mezclan intereses políticos.
Neuville, que ha escrito una carta al presidente del Consejo de Vigilancia de PSA, instancia que dio el visto bueno a esta ampliación de capital reservada a los otros dos socios, hizo notar que entre los tres sumarían un 42%. Y, sobre todo, que si están de acuerdo entre ellos significa que hay una acción de concierto, y en ese caso tendrían que lanzar una opa sobre el resto del capital, o bien conformarse con quedarse con una participación conjunta inferior al umbral del 30% que obliga a lanzar esa operación.
La presidente de la ADAM insistió en que si los tres mantienen el esquema de ampliación de capital reservada a los dos nuevos socios, hay que arbitrar una indemnización al resto de los accionistas (que tienen actualmente tres cuartas partes del capital y dos tercios de los derechos de voto) en forma de bonos de suscripción.
Se espera que PSA comunique los detalles de la operación de aquí a la presentación de sus resultados financieros de 2013 el próximo día 19. La ampliación de capital debe ser aprobada a continuación por la asamblea de accionistas, donde necesita una mayoría de dos tercios.