En los últimos años, la economía brasileña ha crecido a tasas inferiores al 2 anual.
ReutersBRASILIA.- La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, afirmó este lunes que Brasil se convertirá este año en el primer productor mundial de soja, con una cosecha de 90 millones de toneladas que ratificará su condición de gran proveedor de alimentos del planeta.
"Será un nuevo récord de producción que mostrará la fuerza de la agricultura brasileña, lo que es muy importante para el crecimiento (económico), para el abastecimiento interno, para las exportaciones y para la balanza comercial", dijo Rousseff en su programa de radio semanal, que se emite cada lunes.
La afirmación de la presidenta se fundamenta en cálculos de la Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab), que prevé para este año una cosecha de granos en torno a las 193 millones de toneladas, de las cuales 90 millones corresponderán a los cultivos de soja.
En los últimos años, la economía brasileña ha crecido a tasas inferiores al 2 % anual, al tiempo que las exportaciones han caído gradualmente, igual que los saldos de la balanza comercial.
El Gobierno apuesta en el esperado repunte de la agricultura para comenzar a equilibrar esos indicadores, lo cual también dependerá del desarrollo de infraestructuras que ayuden a mejorar la capacidad de almacenamiento y traslado de la producción desde el campo hasta los grandes centros de consumo y los puertos.
En ese sentido, la jefa de Estado recordó que el Gobierno ha aumentado la financiación para el sector agrícola y que ha liberado para los próximos cinco años una línea de créditos por unos 25.000 millones de reales (unos US$ 10.400 millones), destinada a la construcción de silos.
Asimismo, citó un vasto programa de inversiones públicas y privadas para mejorar y ampliar la red de carreteras y puertos, con lo cual se espera reducir los costes de traslado, abaratar la producción y fortalecer así la capacidad exportadora del país.