LONDRES.- La inflación cayó por debajo del 2% en enero en el Reino Unido por primera vez en más de cuatro años, al situarse en el 1,9%, según los datos del índice de precios al consumo (IPC) divulgados hoy.
Según la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS), el índice interanual descendió al 1,9% en enero frente al 2% del mes anterior, por lo que la inflación se coloca por debajo de la barrera del 2% por primera vez desde noviembre de 2009.
En cambio, la tasa interanual del índice de precios minoristas (RPI), que incluye el costo de la vivienda y el pago de los intereses de las hipotecas, subió al 2,8% en enero frente al 2,7% del mes anterior, añadió la fuente.
La caída del IPC respondió principalmente a los descensos de los precios de discos compactos, muebles y otros artículos domésticos, así como una reducción de las entradas para algunos espectáculos.
Las cifras del IPC eran ampliamente esperadas por los expertos de la City (centro financiero) de Londres, que confían en que la inflación siga descendiendo a lo largo de 2014.
Tras conocerse los datos de la inflación, el primer ministro británico, David Cameron, expresó su satisfacción en su cuenta de Twitter y defendió la política económica del Gobierno.
"La caída de hoy de la inflación es otra prueba de que nuestro plan económico a largo plazo está funcionando. Queremos conseguir un futuro seguro para la gente trabajadora", afirmó Cameron.
En ese mismo sentido se manifestó el titular del Tesoro, Danny Alexander, quien dijo que es "otra prueba" de que el plan económico está dando resultados.
Alexander consideró la mejor manera de mejorar el nivel de vida es "controlando la inflación y reconstruyendo nuestra economía".
Desde octubre de 2010, pocos meses después de llegar al poder, el Gobierno de coalición -formado por conservadores y liberaldemócratas- ha aplicado un duro plan de austeridad, con recortes presupuestarios en la mayoría de los ministerios.
Según los expertos, el descenso del IPC será bien recibido por el Banco de Inglaterra, que tiene como meta el 2% de inflación con el fin de mantener bajos los tipos de interés, que se sitúan en el mínimo histórico del 0,5%.
En su último informe trimestral, el banco emisor elevó su previsión de crecimiento para el Reino Unido en 2014 hasta el 3,4%, frente al 2,8% anunciado hace tres meses.
No obstante, el banco emisor advirtió de que la recuperación económica aún no es "ni equilibrada ni sostenible".