MADRID.- Un grupo de expertos reunido hoy en Madrid hizo hincapié en la necesidad de que los países latinoamericanos lleven a cabo reformas estructurales para mejorar su economía.
Esa conclusión se puso de manifiesto durante un debate centrado en el Informe sobre Perspectivas Económicas de América Latina 2014 cuyos autores son la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), la Comisión Económica para América Latina y el Caribe de las Naciones Unidas (CEPAL) y el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF).
Entre los participantes en el debate estuvo el director del Centro de Desarrollo de la OCDE, Mario Pezzini, quien declaró que el "bache" sufrido por los países latinoamericanos en sus economías durante 2013 "ha reducido la ventana de oportunidad" del continente y ha dado lugar a "una fase estructural, más difícil de realizar", en la que llevar a cabo una "diversificación productiva".
El funcionario de la OCDE insistió en la necesidad de superar la excesiva dependencia en la exportación de recursos naturales que sufre la economía latinoamericana, para lo que sugiere aumentar las inversiones en infraestructuras e investigación y desarrollo.
Preguntado sobre los puntos débiles de la zona, Pezzini hizo referencia a la baja inversión en innovación, y al reto que supone mejorar la cohesión social y, sobre las fortalezas, dijo que los países latinoamericanos cuentan con una ventaja respecto a competidores como los países del norte de África, como su mayor cercanía a los mercados.
Ante la dificultad de invertir en un periodo en el que la economía latinoamericana está perdiendo impulso, Pezzini citó como "indispensable" una reforma fiscal con la que aumentar la recaudación y puso como ejemplo la diferencia en esta variable entre la media de la OCDE, situada en un 35% y la de algunos países latinoamericanos en los que es de un 15%.
Otros ponentes que intervinieron en el análisis del informe fueron José Ramón Perea, economista del Centro de Desarrollo de la OCDE; Guillermo de la Dehesa, ex secretario de Estado de Economía de España y actual presidente del Centro para Investigaciones de Políticas Económicas (CEPR por sus siglas en inglés), y Juan Ruiz, economista jefe para América Latina del BBVA.
En su intervención, Perea, aunque "con precaución", predijo un 2014 positivo en el que mejorará la demanda externa, deteriorada durante 2013, y describió como un problema el bajo valor añadido que tiene la exportación de materias primas, tan importante para la economía de la región.
Además, se refirió a la fuerte volatilidad de los mercados financieros vivida durante todo 2013 y el inicio del presente año, que están afectando sobre todo a los países emergentes.
Guillermo de la Dehesa hizo una distinción entre países de la región y aludió a Venezuela y Argentina como aquellos países que tendrán más problemas, debido al desplome de su PIB, la alta inflación y el crecimiento de la deuda, así como al aumento del déficit de cuenta corriente argentino.
Por otro lado, De la Dehesa destacó a Colombia, Chile, Perú y Méjico, como Estados sin problemas económicos y concluyó que "los grandes países latinoamericanos van a poder soportar los envites de la economía", aunque excluyó a Venezuela y Argentina.
Mientras tanto, Juan Ruiz habló sobre la diferencia en el crecimiento económico entre “varias Latinoaméricas” y apuntó que los países de la Alianza del Pacífico crecerán a un 4%, mientras que los de Mercosur (Argentina, Brasil, Bolivia, Paraguay, Uruguay y Venezuela) lo harán en un 2%.
Además, en línea con las declaraciones de Pezzini, Ruiz citó la necesidad de hacer reformas estructurales, con una fuerte inversión en infraestructuras y capital humano, educación y salud.