BRUSELAS.- La inflación de la zona euro se desaceleró en marzo a su menor nivel desde noviembre del 2009, una lectura por debajo de las previsiones y que eleva las expectativas de que el Banco Central Europeo adopte medidas radicales para detener la amenaza de la deflación en el bloque de la moneda única.
La inflación anual al consumidor en los 18 países que comparten el euro fue de un 0,5% en marzo, con el ritmo de la subida de los precios enfriándose desde la lectura de febrero de un 0,7%, dijo el lunes la oficina de estadísticas de la Unión Europea, Eurostat.
Los economistas consultados por Reuters habían pronosticado una cifra de un 0,6%, lo que en sí ya era preocupante para una economía que recién está saliendo de su recesión más prolongada después de una crisis que casi dividió al bloque.
La zona euro está lejos de la deflación que experimentó Japón desde inicios de la década de 1990, cuando los decrecientes precios debilitaron la demanda, provocando recortes salariales e incluso precios más bajos, pero la reducida tasa de inflación del bloque es una clara señal de fragilidad económica.
La inflación se ha ubicado en la "zona de peligro" del BCE por debajo del 1% por sexto mes consecutivo y la lectura aumenta las posibilidades de que el banco recorte sus tasas de interés cuando su Consejo de Gobierno se reúna el jueves.
También ha crecido la especulación de que el BCE pueda emplear otras medidas de estímulo como tasas de depósito negativas o incluso compras de bonos al estilo de Estados Unidos.
Pero los tardíos feriados por Semana Santa este año, que ha retrasado el impacto de los altos precios de los hoteles y los viajes en momentos en que muchas personas salen de Europa, podrían alentar al banco central de la zona euro a esperar hasta su reunión de junio para actuar.
"Esto mantendrá muy vivas las posibilidades de mayores estímulos en la política monetaria", dijo Nick Kounis, jefe de investigación económica de ABN AMRO en Amsterdam. "Sin embargo, el banco central ha mostrado bastante tolerancia por la baja inflación recientemente", agregó.
El BCE, que tiene por objetivo una inflación de poco menos del 2%, mantuvo sin cambios los costos de endeudamiento en 0,25% en marzo y ha argumentado que los riesgos de deflación en el bloque son limitados.