AFP
BRUSELAS.- El presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, desestimó los temores de que la eurozona caerá en una deflación, el fenómeno donde los precios van bajando y se debilita el crecimiento económico.
Los datos más recientes confirman las estimaciones del Banco Central de un "período prolongado de baja inflación seguido por un ascenso gradual", dijo Draghi.
Enfatizó, sin embargo, que la junta directiva del banco es "unánime" en su decisión de mantener una política económica flexible, y que está dispuesto a usar "medidas no convencionales" si la inflación permanece por debajo de sus proyecciones.
Tales medidas incluirían una nueva ronda de créditos bancarios baratos o adquisiciones de activos financieros a gran escala como lo ha hecho la Reserva Federal en Estados Unidos.
El BCE dejó su tasa de interés de referencia sin cambios en 0,25%, un mínimo histórico.